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ÓSCAR SANTOLAYA
Logroño
Martes, 31 de diciembre 2019, 21:09
Los pies son, sin duda, una de las partes más importante de nuestro cuerpo y, en muchas ocasiones, no se les presta el cuidado y la atención que requieren.
Un adecuado cuidado de nuestros pies puede ayudar a mejorar nuestra calidad de vida previniendo ... lesiones en cualquier otra parte de nuestro cuerpo, por eso su cuidado debería ser un hábito en nuestro día a día. A continuación proponemos una seria de consejos que nos ayudaran a cuidarlos y mantenerlos saludable.
Revisar el estado de los pies: Instálese cómodamente teniendo una buena iluminación. Se usara, si es necesario, un espejo para mirarse la planta del pie y si no puede o su vista es mala, pida ayuda a alguien. Siempre se debe observar el dorso, la planta y entre los dedos.
En él se debe descubrir:
1.- Lesiones entre los dedos (grietas, hongos).
2.- Cambio de color, hinchazón, ampollas,etc.
3.- Callos (helomas), durezas (hiperqueratosis) y grietas.
4.- Si observa lesiones nunca utilice objetos cortantes (tijeras, cuchillas,etc.) ni pomadas callicidas (son abrasivas)
5.- Las callosidades (helomas) tiene una doble causa: o una mala pisada del pie o un calzado inadecuado.
Las personas con diabetes tienen un mayor riesgo de tener diferentes problemas en los pies. Por ello deben ser mas exhaustivos en el cuidado de sus pies.
Con respecto a la higiene de los pies hay que procurar una serie de cuidados:
1.- Lave sus pies diariamente.
2.- Utilice agua templada (36-37º), una temperatura excesiva puede producir quemaduras.
3.- Utilice una manopla de baño suave y jabón neutro.
4.- Séquese cuidadosamente, especialmente entre los dedos, si no llega bien a esta zona puede hacerlo con un secador manteniéndolo a una distancia prudencial para evitar posibles quemaduras. Si no se seca bien se puede favorecer el crecimiento de microorganismos patógenos.
5.- Después de la higiene diaria hay que aplicar crema hidratante en talón, planta y dorso de ambos pies para evitar la sequedad. Para ello utilice cremas de urea al 10%. Es contraproducente hidratarse los espacios interdigitales o hacer masajes con alcohol o colonia.
6.- Si su piel es húmeda, lávelos y cambie de calcetines y medias más frecuentemente.
7.- Evitar andar descalzos por zonas propensas a acumular humedad.
Las uñas. Las uñas tienen función de protección, por lo tanto, deben sobresalir 1 o 2 milímetros por delante del pulpejo del dedo y, en este sentido, el corte de las uñas debe ser lo más recto posible. Las uñas deben cortarse con tijera de punta roma, o bien, limarse con una lima de cartón.
Calcetines y medias. Lleve sus pies bien abrigados usando calcetines preferentemente elaborados con fibras naturales como la lana o el algodón.
Evite en la medida de lo posible los sintéticos como el nylon o fibra que en muchas ocasiones impiden la correcta transpiración de los pies aumentando la sudoración.
No use calcetines o medias que opriman el pie.
Evite ligas o elásticos que entorpecen la circulación, utilice preferentemente prendas tipo panty.
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El calzado. El calzado tiene la misión de proteger el pie de cualquier circunstancia del exterior. Por ello es fundamental utilizar un buen calzado, ya que por sus características y por la complejidad de su composición, los pies son una zona sumamente delicada y proclive a sufrir distintas patologías y lesiones.
Recomendaciones para elegir un buen calzado:
1.- Debe ser amplio (no grande), cómodo, flexible, ligero y preferiblemente acordonado para que se adapte mejor al pie.
2.- La puntera no debe ser demasiado estrecha.
3.- Sin costura en antepie y que permita el uso de plantillas.
4.- Inspeccione diariamente el interior de sus zapatos.
5.- Compre el calzado a última hora del día, a estas horas del día el pie está más hinchado.
6.- Al comprar los zapatos no mire la estética y si la comodidad, funcionalidad y ergonomía.
7.- Debe encontrarse cómodo con unos zapatos desde el principio.
8.- No conviene utilizar cada día un mismo par de zapatos. Estos necesitan airearse y secarse. Tampoco alargar la vida útil del calzado una vez que este se haya desgastado o deformado por el uso y el paso del tiempo.
9.- Utilizar el calzado más adecuado para la actividad que vamos a realizar, si vas a correr utilizaremos calzado deportivo específico para correr, si juegas al tenis uno específico para este deporte, etc...
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