I. mENÉNDEZ/MUJERHOY.COM
Lunes, 26 de octubre 2015, 12:17
Nuestros hijos atraviesan en su crecimiento vicisitudes que requieren nuestra ayuda. Lo que más temor nos provoca es que se pongan enfermos. Si la enfermedad que padecen requiere cirugía, aumenta la preocupación. Los padres, nerviosos, tienen que intentar controlar su miedo, hablar de la situación ... con el niño y llevar a cabo un plan sobre lo que es conveniente hacer antes de la operación.
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Lo fundamental es que mantengan a raya su ansiedad. Los niños son muy sensibles al estado emocional de sus padres, pero no tienen los recursos psíquicos de los adultos para entender la situación y si ven a sus progenitores nerviosos, aumentan sus propios temores. (Más información en MujerHoy.com)
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