Preguntas y respuestas sobre el ébola

Según explica el Ministerio de Sanidad en sus protocolos, el ébola está causado por un virus del género Ebolavirus, miembro de la familia de los filovirus, a la que también pertenecen el virus de Marburgo y el Cuevavirus. Se compone de seis especies diferentes y de ellas, la especie Zaire ha sido la responsable de los mayores brotes.

Los Ebolavirus pueden sobrevivir en superficies secas varias horas y en fluidos, varios días a temperatura ambiente. Se inactivan con radiación ultravioleta y gamma, calentándolos durante 60 minutos a 60 grados o hirviéndolos durante cinco minutos.

El periodo de incubación es de entre 2 y 21 días, aunque la media se encuentra entre los 11 y los 13.

Se transmite a través del contacto directo con sangre u otros fluidos corporales (saliva, orina, secreciones, semn, heces, leche materna y órganos) de personas infectadas, vivas o muertas. Una forma inusual de transmisión es por contacto sexual sin protección con hombres hasta siete semanas después de que estos hayan superado la enfermedad.

También se puede contraer la enfermedad a través del contacto directo con sangre u otros líquidos corporales de animales salvajes, vivos o muertos, como monos, antílopes selváticos y murciélagos. El virus del Ébola no se transmite a través del aire, contrariamente a los coronavirus o al de la gripe.

Se trata de una enfermedad hemorrágica febril que comienza de forma brusca con fiebre, dolor muscular, debilidad, dolor de cabeza y odinofagia (dolor de garganta al tragar). Evoluciona con vómitos, diarrea, fallo renal y hepático, exantemas (erupciones cutáneas) y síntomas hemorrágicos que pueden ser en forma de hemorragias masivas internas y externas. En el estadio final, los pacientes desarrollan un fallo multiorgánico que puede desembocar en la muerte o en la recuperación a partir de la segunda semana de evolución.

La mortalidad varía dependiendo del tipo de virus, de las condiciones del paciente o del contexto de la enfermedad. La letalidad es más alta entre los menores de cinco años y los mayores de 30, también entre gestantes y en aquellos casos que se han diagnosticado con retraso o no se dispone de tratamientos.

De esta forma, la letalidad en África está entre el 40 y el 60% (aunque según la Organización Mundial de la Salud, ha llegado a ser de hasta el 90%) mientras que en los 27 casos tratados en Europa y Estados durante 2014 y 2015 se redujo al 18,5%, incluyendo aquellos que fueron repatriados en estado avanzado de la enfermedad.

Se trata con suero de convalecientes, anticuerpos monoclonales y fármacos antivirales, aunque lo más efectivo es la prevención. En noviembre de 2019 la Comisión Europea autorizó la comercialización de una vacuna, de nombre Ervebo y desarrollada por Merck, que se ha usado en los brotes de 2014 y 2015 y en el actual de República Democrática del Congo. En ambas crisis se ha vacunado a profesionales sanitarios, otros trabajadores de primera línea, personas expuestas a casos confirmados y contactos de otros casos. Ninguno de los vacunados desarrolló la enfermedad ni experimentó efectos adversos importantes y la efectividad global de la vacuna se situó en el 97,5%.

El 7 de agosto de 2014 el Gobierno español repatrió a Miguel Pajares, un religioso de 75 años que se contagió en Liberia, donde participaba en las labores de control del virus. En el mismo avión también se trasladó a la religiosa hispano-ecuatoriana Juliana Bonoha. Ambos fueron aislados en el Hospital Carlos III de Madrid. A Pajares se le aplicó un suelo experimental enviado desde Estados Unidos, pero falleció el 12 de agosto. Mientras, los análisis mostraron que Bonoha no estaba contagiada, y se le dio de alta el 28 de agosto.

El 20 de septiembre se confirmó otro caso en un misionero español, Manuel García Viejo, en Sierra Leona. Fue trasladado a España y murió el 25 de septiembre de 2014.

El 6 de octubre Sanidad informó de que una Teresa Romero, una auxiliar de enfermería que había atendido a García Viejo, también estaba contagiada. Se trataba del primer contagio fuera de África en España y Europa. Su perro, Excálibur, fue sacrificado. El 1 de noviembre Romero fue dada de alta.