La incidencia acumulada cae ligeramente y se sitúa en 229 casos

Eso sí, la cuarta ola del virus, aunque parece frenarse en los datos medios del conjunto del país, muestra enormes diferencias de casi 500 casos entre unos territorios y otros. Así, el País Vasco ha continuado siendo una jornada más, la comunidad más castigada, con una incidencia de 517, más del doble de los 250 que el 'semáforo covid' marca como riesgo extremo. Por detrás de ella y también en riesgo extremo, pero a considerable distancia, se encuentran Madrid (384), Melilla(365), Navarra (342), Cataluña (295), Aragón (290), La Rioja (268) y Cantabria (256). La situación de estas autonomías contrasta con la de la Comunidad Valenciana, que se mantiene en 43 casos y desde hace semanas es la única que cumple el objetivo fijado por el Gobierno para entrar en la 'nueva normalidad' postvirus, estar por debajo de 50 casos.

Los datos de nuevos contagios, 9.135 en las últimas 24 horas, y de fallecidos, 136, ofrecen una doble lectura: por un lado, confirman la estabilización de la pandemia en España y permiten augurar que la cuarta ola va camino de convertirse en una «olita», como pronosticó el director del Centro de Coordinación de Emergencias y Alertas Sanitarias (CCAES), Fernando Simón.

Pero por otro, la 'olita' ha sido devastadora para las personas que han perdido a alguien cercano o que tienen a un familiar luchando por su vida en las unidades de cuidados intensivos. Desde el 17 de marzo, el día en que se alcanzó la incidencia más baja del 2021, con 127 casos, se han contagiado en España 317.961 personas y han fallecido 5.423. Según los datos oficiales del Ministerio de Sanidad, que sólo contabilizan a quienes han dado positivo en una prueba, desde el inicio de la pandemia se han infectado de coronavirus en España 3.524.077 personas (de las que 130.609 son profesionales sanitarios) y han fallecido 78.216.

Las camas de hospital y unidades de cuidados intensivos, otro termómetro de la pandemia, no aligeran su carga de pacientes covid. El número total de ingresados por coronavirus se sitúa en los 9.968, de los que 2.308 permanecen en las UCI. En estas unidades la ocupación por enfermos del virus está en el 22,92%, y en el 7,69% en el total de las camas.

Si el panorama actual ofrece pocos cambios, algunos indicadores apuntan a que la situación de la pandemia podría mejorar en el medio y en el largo plazo. La incidencia acumulada a siete días, 104,86 casos, sigue estando muy por debajo del 50% de la de 14; también cae la tasa de positividad, el porcentaje de positivos por las pruebas realizadas, que disminuye hasta el 7,29%; y el número de brotes en los centros sociosanitarios (residencias de mayores) está en niveles de mínimos desde el comienzo de la pandemia gracias a la vacunación.

Además, la vacunación sigue cogiendo velocidad y este viernes se alcanzó un nuevo hito: se batió el récord de inoculaciones al superarse por primera vez las 500.000 dosis inyectadas en una jornada (504.823). Las comunidades autónomas ya han administrado 16.364.000, el 92,9% de las 17.610.000 que han recibido, y a más 11.763.000 personas (el 24,8% de la población) se les ha administrado por lo menos una inyección de la vacuna, mientras 4.689.766 (el 9,9%) cuentan ya con la pauta completa.