Sanidad enfría las expectativas de una pronta vacuna mientras la epidemia se dispara con más de 2.500 casos en un día

El director de Emergencias de Sanidad, Fernando Simón, no ha querido alentar falsas esperanza tras la noticia de que el Ejército chino cree haber desarrollado una vacuna efectiva contra el COVID-19. «Las vacunas que se están generando están en las primeras fases, aunque son prometedoras», ha reconocido el alto cargo de Sanidad, quien ha aclarado que una cosa es que se esté cerca de encontrar esa vacuna y otra cosa muy diferente es que éste «esté disponible».

Simón ha destacado que mucho antes de que esos medicamentos puedan estar en los centro médicos deben pasar exámenes, sobre todo para confirmar que no tienen efectos secundarios. Todo ello, ha insistido, al margen de que las empresas que encuentren la fórmula tengan la «capacidad de producción suficiente».

Sin una vacuna a la vista, el Ministerio de Sanidad sigue analizando muy de cerca las estadísticas de la evolución de la pandemia en España. Unos estudios que confirman que la curva infectiva, lejos de achatarse, sigue haciéndose cada día más inclinada, lo que apunta a que el país todavía sigue lejos de haber alcanzado el pico. Los 2.538 casos computados entre el martes y el miércoles, tal y como ha recalcado Simón, suponen incremento de infecciones diario cercano al 18% con respecto a la media de los últimos días.

Aunque el crecimiento parece algo más sostenido en términos porcentuales que durante la últimas semanas, nunca antes desde que estallara la crisis actual se habían superado los 2.000 nuevos positivos en un solo día. Hasta ahora, el día más negro de la expansión del coronavirus había sido el pasado domingo con dos millares exactos de nuevos casos en 24 horas.

El hecho de que las cifras, aunque de forma irregular, sigan marcando una tendencia claramente al alza y con incrementos de dos dígitos de un día para otro -explican los técnicos de Sanidad- revela que quedan al menos dos semanas para llegan a la «cumbre de la curva». Los modelos matemáticos más optimistas usados en el departamento que dirige Salvador Illa ( y que no son compartidos por todos) apuntan a un posible punto de inflexión en la primera semana de abril, tras los datos conocidos este miércoles.

Madrid sigue, con mucho, liderando los casos de coronavirus con casi la mitad del país con 5.637 positivos, seguida de Cataluña con 1.866 infectados, País vasco con 973, Andalucía con 859 y Comunidad Valenciana con 726. Con estos números, la tasa de infectiva se sitúa en 28 positivos por cada 100.000 habitantes.

En las últimas horas, además, se han registrado 107 fallecidos, lo que eleva el número total de víctimas mortales a 598. No son tampoco estadísticas halagüeñas. Se trata del mayor número de víctimas mortales registradas en una jornada a excepción de los 182 muertos contabilizados el martes.

De los casi 14.000 diagnosticados hay 774 enfermos graves, que se encuentran en la UCI. El 42% de esos pacientes está ingresado en centros hospitalarios en la actualidad.

Se computan ya 1.081 casos de personas curadas con alta hospitalaria. O lo que es lo mismo, como ha recalcado Simón, el 7,9% ya se ha recuperado. Esa tasa –ha explicado, es mucho mayor en zonas como Madrid, donde la epidemia se declaró con más virulencia antes, con tasas del 17% de altas.

El numero de altas se sigue muy de cerca. Una epidemia se considera controlada y en declive cuando la cifra de curados diarios comienza a superar a la de contagiados confirmados ese día. Y esa proporción todavía es muy desfavorable: ayer hubo 53 altas frente a 2.538 nuevos casos. O sea, por cada persona curada en la actualidad se infectan casi 48.