Una de cada diez personas con VIH no sabe que porta el virus

En 2022, el número de diagnosticados en la región europea (que incluye 53 países) creció un 4,2% y se situó en los 110.486, con una tasa de prevalencia de 12,4 por cada 100.000 habitantes. Varios países registraron su récord histórico de infecciones, pero este dato, que parece negativo, en realidad obedece a la reanudación de las pruebas de cribado, tras la pausa forzosa provocada por la covid-19, a la ampliación de los servicios de VIH y a la puesta en marcha de nuevas estrategias de pruebas.

«Si bien un aumento en los diagnósticos en 2022 puede parecer algo malo, es evidente que vamos en la dirección correcta y que muchas personas que viven con el VIH pueden acceder mejor a las pruebas, el tratamiento y los servicios de apoyo. Pero podemos y debemos hacer más», corrobora la directora del ECDC, Andrea Ammon.

El retraso en las pruebas explica una de las conclusiones más preocupantes del informe europeo: la mitad de los diagnosticados comienza demasiado tarde su tratamiento, lo que contribuye «a peores resultados y a la continua propagación del VIH», explican los expertos europeos.

En los recién diagnosticados, los casos de VIH son predominantemente hombres más jóvenes. El contacto entre heterosexuales fue el principal modo de transmisión del VIH en 2022 y desde 2014 se ha registrado una disminución de los contagios en el grupo de hombres que mantienen sexo con otros hombres.