Una ola de bronquiolitis amenaza con colapsar las UCI pediátricas

Las medidas preventivas contra la covid-19 y, ahora, el fin de las restricciones han provocado cambios en la temporalidad del VRS. Si antes de la pandemia la bronquiolitis se disparaba a finales de octubre, este año se empezaron a atender casos en julio. Pero los médicos alertan de que aún no se ha alcanzado el máximo de casos. «Nuestra principal inquietud es que, actualmente, no sabemos cuándo se va a alcanzar el pico máximo ni si la gravedad de los casos será mayor que en otras temporadas, o durante cuántos meses confluirá esta epidemia con la infección de otros virus epidémicos, como la gripe, y ya endémicos, como la covid», señala Paula Vázquez, presidenta de la SEUP.

El sistema de Vigilancia Centinela de Infección Respiratoria Aguda en Atención Primaria (IRAs) y en Hospitales (IRAG) para gripe, covid-19 y otros virus respiratorios muestra un crecimiento claro de los contagios, principalmente en el grupo de niños de entre 0 a 4 años, los más afectados, con una tasa de positividad del VRS de un 17%, de 10.9% en gripe y un 17.9% en SARS-CoV-2 en la semana del 10 de noviembre.

El virus respiratorio sincitial (VRS) es un patógeno que provoca la inflamación de los minúsculos conductos pulmonares llamados bronquiolos, lo que produce la bronquiolitis. Se trata de la primera causa de infección respiratoria aguda en niños y el principal motivo de hospitalización en menores de 2 años en países desarrollados. En España, las infecciones por este virus originan entre 7.000 y 14.000 hospitalizaciones cada año en España.

El aumento de los casos está ocasionando «un llamativo retraso de la atención de los pacientes en las unidades de urgencias pediátricas de España, tanto debido a problemas de recursos humanos como de espacio en las propias unidades de observación, en camas de hospitalización, así como en las camas de cuidados críticos», denuncian los profesionales, lo que puede «afectar a la atención de calidad y a la seguridad» de los pacientes.

Entre otras medidas, los pediatras reclaman crear espacios donde ubicar a los pacientes pediátricos a la espera de tener camas en hospitalización o en las unidades de críticos; habilitar salas de prealtas, donde los menores puedan esperar en condiciones adecuadas; incorporar pruebas de detección rápida de VRS, gripe y covid y de ecografía pulmonar a pie de cama con el fin de agilizar el circuito asistencial; la creación de un observatorio en tiempo real del VRS; y refuerzos de personal sanitario a todos los niveles.