Secciones
Servicios
Destacamos
Álvaro Soto
Viernes, 8 de julio 2016, 13:50
La adicción a los juegos on-line ha dejado de ser un problema minoritario. Aunque no existen datos exactos, debido a la dificultad de que muchos enfermos reconozcan su patología y a que la actividad puede desarrollarse en casa, sin que nadie más la perciba, ... los expertos estiman que entre el 3 y el 5% de la población española está enganchada a este tipo de ocio, que interfiere en la vida familiar, en los estudios y en el rendimiento en el trabajo de quien la padece, además de acarrear otros problemas colaterales, como la obesidad.
"Internet ha facilitado la tecnología para que el juego sea asequible, anónimo y accesible las 24 horas del día. Los jóvenes no necesitan ir a una sala a jugar, donde puede haber restricciones, y el momento aversivo (cuando uno pierde) se retrasa 25 días, al jugarse con tarjeta de crédito", explica Enrique Echeburúa, catedrático de Psicología Clínica de la Universidad del País Vasco y coordinador del libro 'Abuso de internet. ¿Antesala para la adicción al juego de azar online?', una obra patrocinada por la Fundación Codere y presentada este viernes en Madrid en la que 20 expertos analizan esta enfermedad.
Según Echeburúa, las apuestas por internet poseen un elemento que las hace irresistibles para un amplio segmento de la población: la idea de apostar basándose en conocimientos previos. "El hecho de pensar que si sigues la trayectoria de un jugador o de un equipo tienes más posibilidades de acertar resulta muy atractivo", subraya el catedrático. Una característica que comparten los juegos de habilidad, como el póker, y que deriva en que las personas de más edad prefieran las tragaperras (en el caso de los hombres) o el bingo (las mujeres), en contraposición a los jóvenes.
Uno de los problemas que afrontan los expertos a la hora de tratar a los enfermos tiene que ver con la todavía reciente implantación de las apuestas on-line en España. Muchos adictos todavía no se consideran como tales, pero los que están ya acudiendo a las consultas responden a este perfil: veinteañeros que llevan unos años jugando sin darse cuenta del problema, adictos también a las redes sociales y con interés por los juegos de habilidad. "Hay un sesgo interesante. Sabemos de jóvenes que con 12 o 13 años eran muy buenos con los videojuegos y aunque no es lo mismo, se acaban enganchando a las apuestas", explica Francisco Labrador, catedrático de Modficación de la Conducta de la Universidad Complutense de Madrid y coautor del libro.
A juicio de Labrador, resulta básico detectar el problema lo antes posible, y en este punto, el experto reclama más colaboración por parte de los operadores. "Son gran parte del problema y deberían ser parte de la solución", sostiene. Una de las posibles soluciones, por ejemplo, pasaría por poner en marcha páginas webs que permitan a los posibles adictos identificar si el modo en que llevan a cabo la actividad es problemático. Labrador cuenta que en otros países ya existen estas webs, que ofrecen una descripción del problema, permiten un hacer un cuestionario, muestran un sistema de chequeo para el jugador y finalmente, establecen un perfil de él. Además, los autores del libro coinciden en que debería ser la sanidad pública la que se hiciera cargo de este problema, una responsabilidad que actualmente recae en asociaciones que trabajan contra las adicciones.
En la parte de las responsabilidades, el catedrático Enrique Echeburúa pone el foco en las grandes estrellas del deporte que anuncian apuestas on-line, como Rafa Nadal o Neymar. "Deberían ser conscientes de que hacen publicidad de algo que puede arruinar la vida de muchas personas", insiste.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Estos son los mejores colegios de Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.