Secciones
Servicios
Destacamos
Daniel Roldán
Sábado, 11 de abril 2015, 07:36
El diagnóstico temprano es una de las grandes asignaturas pendientes en el tratamiento de los enfermos de Parkinson por el desconocimiento del origen de la dolencia, que afecta a unos 150.000 españoles, y la lectura equivocada de los síntomas. Aunque los más comunes son ... el temblor de una extremidad en reposo o una lentitud de movimientos, las personas que sufrirán esta enfermedad no aprecian estos hechos como unos avisadores de la dolencia. "Existe un porcentaje de afectados, sobre todo ancianos que no consultan a sus médicos porque lo consideran un síntoma propio de la vejez", explica el doctor José Antonio López Trigo, presidente de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG). Unas diez mil personas son diagnosticadas cada año.
Y es que España es uno de los países donde se tarda más en diagnosticar esta enfermedad: una media de uno a cinco años desde que aparece el primer síntoma hasta que se obtiene el diagnóstico. Además, la situación se complica cuando esta enfermedad, cuyo día mundial se celebra hoy, se expresa con una rigidez o una depresión. "También suele achacarse a otras causas. Y hay que tener en cuenta que entre el 30 y el 40% de los casos de esta enfermedad no hay temblor", apunta a su vez el doctor José Matías Arbelo González, coordinador del Grupo del Estudio de Trastornos de Movimiento de la Sociedad Española de Neurología (SEN).
Esta confusión en los síntomas, asociándolos a la edad, hace que tampoco se 'traduzcan' otras manifestaciones ajenas a la actividad motriz. Así, los pacientes destaca la reducción de la capacidad de percibir olores (hasta el 80% de los pacientes distingue mal los diversos olores, es lo que se conoce como hiposmia), trastornos de conducta durante la fase REM del sueño, la depresión o el estreñimiento, que es también considerado como un síntoma frecuente y puede presentarse hasta en la mitad de los casos.
"El retraso en el diagnostico hace que en muchos casos las terapias sintomáticas y neuroprotectoras se inician cuando ya existe una pérdida de neuronas dopaminérgicas en la sustancia negra, superior al 60%. En tales circunstancias la eficacia terapéutica es menor: es necesario mejorar los tiempos de diagnóstico", señala Arbelo sobre esta enfermedad, que nace sobre los 60 o 65 años aunque se han dado casos en personas mucho más jóvenes. El ejemplo más famoso es el actor Michael J. Fox.
Ambas sociedades coinciden en que una dieta sana, rica en fibra, y mantener una adecuada hidratación es fundamental para frenar los efectos de la enfermedad. También el ejercicio físico, sin que tenga efectos secundarios sobre el enfermo es beneficioso. "El tai-chi ha demostrado ser una de las mejores actividades para mejorar síntomas como el trastorno de equilibrio o de la postura", señala el responsable de la SEN. Eso sí, siempre consultando antes con el médico.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.