Aumentan las bajas laborales de los médicos por culpa de las agresiones de pacientes y familiares

El Observatorio de Agresiones de la Organización Médica Colegial (OMC), presentado hoy, explica que nueve de cada diez casos de conductas violentas se producen en el ámbito público (centros de salud y hospitales). Sobre el área donde se produce la agresión, la Atención Primaria es el lugar donde se producen casi la mitad de los casos (48%) frente a la hospitalaria (16%). Por su parte, las urgencias dentro de los centros de salud supusieron un 10% de los casos, al igual que las extra hospitalarias. En este último apartado se encuadra el caso de Guillermo Muñoz.

Médico de Urgencias durante 32 años, el ataque se produjo el pasado enero. Su empresa de sanidad privada le llamó para que se acercara a un domicilio en Madrid. Una madre estaba preocupada por uno de sus dos hijos de ocho años. Su hermana estaba ya tomando un jarabe. "Quería que le diera ibuprofeno y yo le receté paracetamol porque veía que era lo mejor", ha explicado. La progenitora tampoco lo quería en sobres sino en jarabe. Después de cumplimentar la receta, la madre se abalanzó sobre Muñoz para "darme puñetazos e insultarme". Los ataques continuaron en el descansillo, esta vez con un bote. El médico se protegió con su maletín.

Tras salir de la casa, acudió a comisaría a poner una denuncia después de informar a su empresa y su médico de cabecera le realizó el correspondiente parte de lesiones. Del total de las agresiones, en el 18% de los casos provocaron lesiones y el 12% conllevaron una baja laboral, lo que supone un aumento de tres puntos con respecto a 2013, según el estudio de la OMC. Ahora, el colegio lleva el caso de Muñoz después de la que empresa se desentendiera del suceso. El 60% de las acciones llevadas a cabo por los colegios médicos acabaron en diligencias; en dos de cada tres casos se presentaron denuncia y en más de la mitad se celebró juicio.

En cuanto a las causas principales de las agresiones, el 30% se produce por discrepancias en la atención médica; el 12% por el tiempo en ser atendido; el 11% por discrepancias personales; el 9% por no recetar el medicamento propuesto por el paciente; el 6% en relación a la incapacidad laboral; el 5% por emitir informes médicos no acordes con sus exigencias; el 4% corresponde al malestar por el funcionamiento del centro y el 23% por otras causas.