La crisis y el intrusismo provocan un descenso del 18% en la cirugía plástica en cuatro años

Por este motivo, la Secpre ha reclamado al Gobierno que regule el sector como ha sucedido en Bélgica, donde solo pueden trabajar los profesionales que tienen la especialidad en un sector que en 2013 facturó más de 304 millones y realizó cerca de 65.000 intervenciones quirúrgicas. Unos datos recogidos en 'La realidad de la cirugía estética en España 2014', un informe que ha actualizado los últimos datos que databan de hace cuatro años. Un estudio que revela un cambio de tendencia. En 2009, la principal operación era la liposucción; ahora es el aumento de mamas. Se realizaron 16.111 el año pasado, lo que supone un 24,8% del total de las operaciones.

A continuación se sitúan las liposucciones (11.803, un 18,1%); la blefaropastia o la cirugía de los párpados (6.581 operaciones, un 10,1%); los rellenos con grasa autóloga, extraída del propio cuerpo (4.494, un 6,9%), las rinoplastias (4.362, un 6,7%) y la combinación del aumento de mamas y su elevación (se realizaron 3.970 operaciones, un 6,1% del total).

Por otra parte, el 87,8% de las operaciones fueron practicadas en mujeres y el 12,2% a hombres, unas cifras muy similares a las del anterior informe. Ellos demandan más liposucciones (dos de cada diez), seguidas de la cirugía de párpados, en la nariz, la ginecomastia (reducción o extirpación de las glándulas mamarias) y la otoplastia (cirugía en las orejas). Ellas optan por el aumento de mamas, la liposucción, la blefaroplastia, el aumento más elevación de mamas y la abdominoplastia.

Menores

En cuanto a las edades, es entre los 30 y los 44 años cuando más se recurre a la cirugía estética (cuatro de cada diez casos), situándose las franjas anterior (18-29) y posterior (45-60) en el 23,8% y el 27%, respectivamente. Entre los 18 y los 44, la mayor demanda está en el aumento de mamas y la liposucción, mientras que de 45 a 60 manda la blefaroplastia. A partir de los 60, el rey es el llifting facial.

El estudio incluye por primera vez a los menores de edad, que representan el 1,3% de todas las operaciones. Casi la mitad de estas cirugías se deben a otoplastias. "Las cirugías en las orejas pueden efectuarse en menores siempre que sean ellos mismos los que las demanden y exista un informe clínico. Suelen ser problemas congénitos que hay que arreglar. Siempre es cirugía reparadora", ha indicado la doctrora Marta García Redondo, secretaria general de la Secpre.