La UME, en la reserva

Es más, preguntado por la posibilidad de que las Fuerzas Armadas se impliquen en la crisis, el ministro de Defensa recordó ayer que fue el Ejército el responsable del traslado de los misioneros desde África, pero que, a su juicio, no hay diferencia de recursos entre el ámbito militar y el civil. «No hay ni más medios ni distintas doctrinas de utilización de sistemas de protección en asuntos de grandes infecciosos», aseguró Pedro Morenés. El Gobierno está en cualquier caso en coordinación con la Unión Europea para dar una respuesta compartida a la situación en los propios países africanos con la certeza de que la contención de las enfermedades allí es «garantía de seguridad» para todos.

En caso de necesitarlo, España está sobradamente preparada para hacer frente a una crisis similar. En la actualidad existen varias unidades dentro de los distintos Cuerpos y Fuerzas de seguridad especializados en el tratamiento de riesgos nucleares, biológicos y químicos (NBQ). Tanto bomberos como Policía Nacional, Guardia Civil, Ejército e incluso Protección Civil disponen de material y procedimientos específicos para responder a un ataque químico. Pero entre la élite de la defensa NBQ, es el Ministerio de Defensa el que cuenta con la unidad mejor preparada: la Unidad Militar de Emergencias (UME), que permanece en alerta por si recibe una llamada que le obligue a tomar las riendas de la situación.

Esta unidad nació en 2005 para mejorar la respuesta del Estado a las emergencias, convirtiéndose en la unidad de primera intervención de las Fuerzas Armadas en estas situaciones. De hecho, la UME, que tiene su cuartel General en Torrejón de Ardoz (Madrid), al igual que el regimiento de Apoyo e Intervención en Emergencias (RAIEM), el Batallón de Transmisiones (BTUME) y el Primer Batallón de Intervención en Emergencias (BIEM I), cuenta con medios y personal sobradamente cualificado para acometer situaciones y crisis de riesgos químicos y bactereológicos. Además, la UMEcuenta con el segundo Batallón de Intervención en Emergencias (BIEM II), en Morón (Sevilla), con el tercer Batallón de Intervención en Emergencias (BIEM III), en Bétera (Valencia), con el cuarto Batallón de Intervención en Emergencias (BIEM IV), en Zaragoza y con el quinto Batallón de Intervención en Emergencias (BIEM V), en San Andrés de Rabanedo (León).

Interés nacional

Aunque de momento se descarta y se apuesta por la gestión de Sanidad, en caso de que se declarara el ébola como una emergencia de interés nacional correspondería al general jefe de la UME asumir, bajo la autoridad del ministro del Interior, la Dirección Operativa de la Emergencia. A final de este año la Unidad Militar de Emergencias tiene previsto alcanzar la operatividad completa conocida como NRBQ -nuclear, radiológico, biológico y químico-. Un paso más en la defensa NBQ, cuya finalidad es minimizar los efectos de un incidente cuyo origen sea una arma, un artefacto o un material tóxico. Además, el Ministerio de Defensa cuenta con uno de los 16 laboratorios que en todo el mundo ha designado la OPAQ (Organización para la Prohibición de Armas Químicas), dependiente de la ONU, para inspeccionar y detectar de forma inequívoca la presencia de armas químicas.

Mientras el Gobierno se decide a solicitar su participación, la UME sigue en la reserva. De momento saben que tendrán que esperar porque el ébola es una asunto del Ministerio de Sanidad.