Muere en combate un militar español que desertó de la Armada para luchar en Ucrania

Ayer, desde primera hora de la tarde, la información sobre la muerte del joven cántabro corrió como la pólvora en redes sociales, primero dudando sobre la veracidad de la noticia del periódico 'El Español', que los propios amigos desconocían. Luego, confirmándose los peores presagios.

Recientemente se había corroborado que el soldado había pedido una excedencia de tres meses, pero nunca se reincorporó a su puesto. La Armada denunció la desaparición y la Guardia Civil comenzó ahí la investigación.

Cuando la decisión de no volver se hizo pública, la familia pidió respeto a la espera del resultado de la investigación policial, que no tardó en ubicar a Sergio Antolín en Ucrania. Se había alistado en el ejército ucraniano para luchar contra la invasión rusa.

A sus amigos no les sorprendió. Sabían de su vocación militar, lo mismo que su hermano mayor, Iván, también integrante del Ejército español. Pero nadie de su entorno más cercano entendió su marcha como una deserción, sino como un paso adelante en esa vocación y en su afán por defender a un pueblo que estaba siendo castigado por la guerra, como ayer mismo recordaban algunos de sus amigos de Los Corrales, aún impactados por la noticia de su muerte.

La madre del joven soldado, Viviana, corraliega conocida y querida, no quiso hablar entonces, cuando se hizo pública su desaparición, y tampoco ha querido hacerlo ahora, al confirmarse la triste noticia del fallecimiento de su hijo pequeño. Pero sí tuvo fuerza para agradecer las muchas muestras de pesar y las incontables condolencias llegadas desde todos los ámbitos.

En el Club Atlético Corrales-Maderas Peña Lastra, su responsable, Daniel Salmones, recordaba el paso de los dos hermanos Antolín por sus filas «cuando eran muy jóvenes». Los describe como «buenos chicos y buenos deportistas, pero lo dejaron pronto».

Antes habían probado en el balonmano, muestra clara de que el deporte les gustaba. El deporte y el Ejército. Primero fue Iván y luego Sergio. Ambos se alistaron, por separado, para cumplir con su deseo. Sergio lo hizo hace unos tres años, jurando bandera en Cartagena (Murcia).

A partir de ahí, el 25 de diciembre del año pasado tomó otra importante decisión: no regresar a su acuartelamiento del Tercio de la Armada de San Fernando. Desde 'El Diario de Cádiz' aseguraban entonces que fue la propia Armada la que denunció la desaparición del joven cántabro ante la Guardia Civil, responsable de esas investigaciones. Después, otras informaciones que ahondaron en el caso, apuntaban que el soldado había tomado esa decisión al conocer el ataque de Rusia sobre Járkov, Dnipro y Kiev. Quería poner en práctica sus conocimientos como soldado y defender al pueblo ucraniano del avance del ejército de Putin. Sin embargo, su decisión ha tenido el peor de los desenlaces. El soldado español habría perdido la vida recientemente en el frente, durante un combate contra las tropas rusas, según la información recabada por el periódico gaditano, que añade que la documentación personal y las pertenencias del joven cántabro han sido enviadas de vuelta a las autoridades españolas para que su familia las pueda recoger cuando lo solicite.

Desde el Ayuntamiento de Los Corrales de Buelna, tanto el alcalde, Julio Arranz, como el concejal de Personal, Seguridad Ciudadana y Servicios Sociales, Alfredo Casanova, lamentaron el fallecimiento del joven soldado corraliego «en nombre de toda la Corporación municipal».