Las 5 monedas españolas más valiosas, hasta 2 millones de euros por cada ejemplar

El Banco de España estimaba en 2021 que todavía faltaban 1.586 millones de euros todavía por cambiar de las antiguas pesetas. La fecha límite para canjearlos era el 31 de diciembre de 2020. Según estos datos muchos ciudadanos todavía conservan muchos ejemplares en sus hogares con los que pueden aumentar sus ingresos de forma considerable.

La página web especializada 'Coleccionistas de Monedas' ha recopilado algunas de las monedas españolas más valiosas. Vale la pena revisar el listado y comprobar si alguna está en nuestro poder:

Su acuñación se hizo en la Casa de Moneda de Segovia, de donde salieron las piezas más bellas del mundo durante siglos.

Emitida en 1609 bajo el reinado de Felipe III, el centén segoviano de 1609 cuenta con 100 escudos de oro y es una de las más importantes de la numismática en España. Su exclusividad, ya que solo se crearon siete piezas, elevaba su valor a 800.000 euros en 2009, fecha en que fue vendido por última vez. En la actualidad, el cetén segoviano está tasado según los expertos en más del doble: su precio asciende a dos millones de euros.

Estas monedas de oro fueron acuñadas en Sevilla durante el reinado de los Reyes Católicos, aunque finalmente fueron sustituidas en 1532 por los escudos. Dependiendo de su estado de conservación, su precio oscila entre los 300.000 y los 600.000 euros

Acuñadas por primera vez en Lima (1659), esta tipología de monedas sirvió para comercializar internacionalmente. Hoy en día, las onzas más caras son las mexicanas ya que su valor asciende a los 475.000 euros, mientras que las demás pueden llegar a los 300.000.

La onza segoviana del año 1611 es una moneda sin circular cuyo coste en las subastas asciende a los 300.000 euros.

Solo existen doce ejemplares: seis de ellas pertenecen a particulares mientras las otras seis forman parte de la colección de la Fábrica de Moneda y Timbre de España (FNMT).

La última venta de esta moneda se realizó en una subasta por 150.000 euros, aunque se puede llegar a pagar hasta 250.000 por una sola pieza.