Los mejores consejos para viajar en la tercera edad

Viajar puede ser una de las experiencias más enriquecedoras que una persona puede tener, sin importar la edad. Sin embargo, una vez que se alcanza la tercera edad, se deben tomar ciertas precauciones de seguridad para garantizar que el viaje sea lo más tranquilo, cómodo y sin problemas posible. En este artículo proporcionaremos los mejores consejos que permitirán viajar sin ninguna preocupación en esta etapa de la vida.

Cuando se trabaja con un horario ajustado, no se debe pasar por alto ningún detalle, ya que eso podría resultar en el fracaso de los planes. Investiga sobre tu destino, el clima, sus características de accesibilidad e incluso los medios de transporte disponibles. Si tomas medicamentos, no olvides llevar suficientes dosis para todo el viaje e incluir una copia de tus notas de prescripción por si necesitas más medicación.

Además, hay que tener un cuidado extra al verificar las restricciones de acceso al destino elegido durante una pandemia o emergencia. Adicionalmente, infórmate sobre el estado de vacunación necesario, las reglas locales y si se necesita presentar algún documento de identificación especial al ingresar al país.

Uno de los aspectos más importantes de viajar con tranquilidad es elegir el mejor seguro de viaje para tus necesidades y preferencias. Presta atención a detalles como gastos médicos, tarifas de cancelación, equipaje perdido y cualquier posible emergencia. Para viajeros de la tercera edad es particularmente importante contar con un seguro que cubre eventualidades de salud.

Los mejores seguros de viaje pueden tener subcategorías que aborden situaciones médicas de emergencia, la repatriación por tratamiento y hasta el regreso al país si el incidente es grave. Además, para viajar seguro  algunas pólizas ofrecen acceso a asistencia en varios idiomas, día y noche, lo cual es muy útil al tratar con situaciones urgentes.

No todos los lugares son adecuados para los viajeros maduros y esta es la razón por la cual algunos destinos se adaptarán mejor a este grupo demográfico que otros.

Ten en cuenta aquellos que ofrezcan buena infraestructura, accesibilidad en el transporte y facilidad de recorrer lugares para personas con movilidad reducida. Las ciudades que cuentan con transporte público accesible y instalaciones médicas pueden mejorar la experiencia considerablemente para la tercera edad.

También es relevante verificar si hay tarifas especiales disponibles para mayores en museos, sitios emblemáticos y transporte público.

Antes de tu viaje, especialmente si es internacional o hacia un lugar con clima extremo, asegúrate de ver a tu médico para un chequeo.

Es recomendable conservar un informe médico que resalte el estado de salud, tratamientos en curso y cualquier alergia que padezca el viajero.

El médico debería informar si necesitas llevar documentos específicos a los aeropuertos internacionales en el caso de que tengas problemas de movilidad o usas dispositivos médicos como marcapasos. Así mismo, asegúrate de saber dónde se encuentran los hospitales y farmacias en tu destino si tienes una enfermedad crónica.

La dieta es un factor importante para la salud durante el viaje. Identifica bocadillos y comidas saludables que proporcionen sustento y sean capaces de mantenerte hidratado mientras evitas alimentos que puedan alterar tu estómago. También es bueno tener snacks saludables a mano para evitar largas horas sin comer.

Si viajas a un país extranjero, familiarízate con los platos básicos y ten cuidado con los ingredientes para evitar alergias y malestar estomacal. Una botella de agua reutilizable también será útil y asegúrate de beber solo agua embotellada para evitar enfermarte.

Durante tu viaje, lleva ropa ligera y transpirable adecuada para el clima de tu destino, así como zapatos cómodos para largas caminatas. Si hay alguna preocupación con la circulación, los calcetines de compresión son útiles al viajar largas distancias, ya sea en vuelos o por carretera.

Para regular la temperatura del cuerpo en climas más fríos, usa capas de ropa que te mantendrán abrigado sin exponer demasiado la piel.

Tener un dispositivo móvil con conexión a internet junto con contactos de emergencia puede ser muy útil en tu viaje. Considera compartir tus planes de viaje con familiares o amigos para que puedan rastrear tu ubicación.

Si viajas al extranjero, investiga sobre ofertas de datos móviles internacionales y aplicaciones que no requieran acceso a internet. Además, los mapas y guías que se descargan reducirán la dependencia de las redes móviles.

Siempre hay que llevar una copia del pasaporte, documentos de identidad, detalles del seguro de viaje y referencias de reserva de hotel tanto en formato electrónico como impreso. Esto facilitará el proceso en caso de que algo se pierda o en una situación de emergencia.

En suma, conocer otras sociedades, lugares, y tener tiempo suficiente para disfrutar cada momento es clave en todo viaje. Haber llegado a la tercera edad no debe ser un impedimento para viajar si se toman las debidas precauciones y se contrata un buen seguro de viaje.