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Javier Martínez
Valencia
Jueves, 11 de noviembre 2021, 10:18
¿Qué aspecto tendría Antonio Anglés si estuviera vivo? ¿Murió ahogado en la bahía de Dublín o sigue huyendo con una identidad falsa? Una de las acusaciones del caso Alcàsser y la jueza que recibió el traspaso del sumario tratan de encontrar respuestas para las ... dos preguntas. La magistrada ha remitido a la Policía Nacional un montaje fotográfico del prófugo, con el semblante envejecido correspondiente a una edad aproximada de 55 años, para su posible utilización en una campaña internacional que solicitará la colaboración ciudadana en la búsqueda del criminal.
El nuevo rostro del presunto asesino de Míriam, Toñi y Desirée ha sido elaborado con rigor científico por dos expertos del Instituto de Formación Profesional en Ciencias Forenses, Ricardo Ortega Ruiz y Noelia Medina Sánchez, con técnicas de 'collage', adaptaciones de características faciales y retoques fotográficos mediante cambios de tono y exposición.
La reconstrucción facial de Anglés es el resultado de la evolución de su rostro en el tiempo y cumple los requisitos legales para realizar y difundir un retrato robot, como advertir a la población vulnerable contra delincuentes peligrosos, ayudar en una investigación policial, aportar una evidencia de un fugitivo o retratarlo para elaborar un cartel de búsqueda.
El antropólogo forense y doctor en Ingeniería Biomédica, Ricardo Ortega, y la criminóloga y especialista en imagen digital, Noelia Medina, realizaron la reconstrucción facial con la fotografía difundida por Interpol para la búsqueda del presunto asesino, ya que la imagen «cuenta con la mayor garantía legal para su uso, modificación y distribución», según los expertos.
En su informe, Ortega y Medina explican que utilizaron el programa Adobe Photoshop CC 2020 para envejecer el rostro de Anglés tras analizar algunos rasgos y facciones con carácter de perpetuidad -si el prófugo no se ha sometido a operaciones de estética-, como un quiste sebáceo en el cuello, una caída significativa de la ceja derecha, un nevus en la mejilla derecha y el color azul de sus ojos.
Sin embargo, los especialistas reconocen que no han podido tener en cuenta otros parámetros como la salud capilar, los hábitos de consumo, el estrés o la exposición a la luz solar del fugitivo -factores importantes que pueden acelerar el envejecimiento facial- por encontrarse en paradero desconocido desde hace casi tres décadas.
«Desconocemos su historial médico, podría haber sufrido un accidente que modificase su aspecto facial (quemaduras, amputaciones...) o una enfermedad larga (pérdida de masa muscular o del pelo), y desconocemos la identidad de género actual del sujeto, ya que un cambio en la misma podría modificar tanto su estética visual como su cuerpo mediante operaciones», afirma el informe de los peritos.
También recuerdan que Anglés, en el caso de que no haya muerto, es consciente de la orden internacional de búsqueda y captura por el triple asesinato de las niñas de Alcàsser, y por este motivo, podría haberse sometido a una operación de cirugía estética para modificar los rasgos físicos de su rostro.
El informe de la reconstrucción facial del presunto criminal ha sido remitido al Grupo de Localización de Fugitivos de la Policía Nacional por petición expresa del criminólogo Félix Ríos, presidente de la Asociación Laxshmi para la Lucha contra el Crimen y la Prevención. Como ya informó LAS PROVINCIAS, la Comisaría General de Policía Judicial solicitó al Juzgado de Instrucción número 6 de Alzira que le comunicara si había «algún impedimento para el uso del perfil de Anglés de modo público».
Un día después de recibir la petición, la jueza dictó una providencia en la que afirma que no hay ningún inconveniente por su parte. La campaña de la Policía Nacional y Europol para reactivar la búsqueda de Anglés está previsto que comience en los próximas días con la difusión de varias fotos del prófugo, las identidades falsas que utilizaba en la década de los 90, la descripción de sus tatuajes, sus señas y otros datos personales.
Tras ser informado de la preparación de la campaña internacional, Ríos remitió a la magistrada un informe de más de 50 páginas sobre la fuga de Anglés con la recomendación del uso de la API (Age Progresion Image) cedida a su equipo de especialistas forenses por Ortega y Medina.
Nacido el 25 de julio de 1966 en Sao Paulo (Brasil), Anglés mide 1,76 metros, ahora tendría 55 años de edad y en 1993 llevaba varios tatuajes en su cuerpo: un esqueleto con una guadaña en el brazo derecho, la leyenda «amor de madre» en el brazo izquierdo y una mujer china con un paraguas en el antebrazo izquierdo.
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