La joven española accidentada en Tailandia ya se recupera en un hospital de Valencia

Ni el guionista con la mente más retorcida habría previsto un giro de guión en la historia de Ángela. La buena noticia, la principal en este caso, es que ya descansa y sigue con su recuperación en un cama del hospital La Fe de Valencia. «Sigue en estado de coma y crítica pero estable», afirman sus allegados. Apenas saben nada más por el momento.

Este miércoles 6 de noviembre se cumple un mes desde que se produjo el accidente de moto que le causó graves heridas en la cabeza de las que ha ido recuperándose. En la noche del martes aterrizó su avión en Valencia y se produjo el anhelado traslado para continuar la recuperación más cerca de casa.

Pero el giro de guión, como todo el mundo sabe, se produjo como consecuencia de la DANA que ha arrasado buena parte de la provincia el pasado martes. Godelleta, la localidad de la familia, también fue afectada, con desprendimientos y problemas diversos.

Diego, el hermano de Ángela y quien ha actuado como portavoz durante todo este tiempo, ha relatado que se quedó «aislado y sin comunicación durante varios días». Al ser maquinista de retroexcavadoras, su labor en esta catástrofe ha sido fundamental, por lo que al cansancio del problema con su hermana se ha unido esta inédita situación: «Han sido unos días horribles», afirma. Así, tuvo que sacar fuerzas de donde ya quedaban pocas, debido a la tensión del problema de Ángela y ponerse a sacar barro hasta este mismo martes. Su rutina diaria ha consistido en trabajar entre 12 y 14 horas diariamente y, después, descansar.

De este modo, han sido sus padres, desde Tailandia, quienes ultimaron todos los preparativos del traslado, ya que en Godelleta se quedaron incomunicados. Hoy, Diego, sólo quiere poder abrazar a sus padres y conocer de primera mano que Ángela sigue mejorando poco a poco.

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