José Ceacero, portavoz de las clarisas 'herejes': «Ya era cura cuando hacía cócteles»

- ¿Qué pasó hace dos años?

- Que dejé la hostelería y, simple y llanamente, me dediqué a lo mío. ¡Y lo mío es el sacerdocio! No es ser barman. Eso fue un paréntesis de mi vida.

- ¿Quién le ordenó cura?

- Don Pablo. Don Pablo de Rojas Sánchez.

- Fue excomulgado en 2019 por el exobispo de Bilbao.

-Sí, sí. Por el señor (Mario) Iceta.

- ¿Es posible que le ordene sacerdote alguien excomulgado?

- La excomunión no tiene ningún sentido porque la iglesia del Concilio Vaticano II no tiene nada que ver con la Católica. Que se excomulgue a alguien no anula la validez de la ordenación sacerdotal o de los sacramentos. Don Pablo es verdaderamente obispo y yo soy verdaderamente sacerdote, al margen de las sanciones que nos hayan intentado imponer.

- ¿Qué formación eclesiástica y académica ha seguido?

- Pues hombre, los estudios que tiene que hacer un sacerdote.

- ¿Qué tipo de estudios?

- Filosofía y Teología, mínimo. También tengo otra carrera.

- ¿Cuál?

- Cuento con estudios de Filología Hispánica.

- ¿Cómo se ha convertido en portavoz de las clarisas de Belorado?

- Pues a la fuerza. Salí anteayer a decir que las monjas no quieren que se las moleste. Empecé a hablar y a entrar en directo en un medio de comunicación, luego en otro, y en otro, y en otro... No he salido de esa vorágine todavía, pero las monjas no me han elegido a mí como portavoz.

- Parece habernos cogido gusto a los periodistas.

-A ver, ya estoy entrenado. En la primera entrevista que me hiciste como presidente de los barman de Bizkaia me enfrenté al presidente de la federación. Nadie le tosía y yo le llevé a un tribunal. Ya tengo experiencia en eso, a mí no me van a sacar los colores fácilmente.

- ¿Ha animado a las clarisas a que rompan con Roma?

- No las hemos animado a nada. Las clarisas se han ido desengañando, como todo el mundo que hemos pasado por ese proceso. Yo no nací con sotana diciendo lo que digo ahora. Fueron ellas las que se pusieron en contacto con nosotros. ¿Por qué?

- Respóndase.

- Porque querían la doctrina de siempre para la iglesia católica

- ¿Están detrás de la compra del convento de Orduña?

- No estamos detrás de la compra de nada. El señor Iceta es un mentiroso compulsivo. Quiere quedarse con el convento de Orduña y echar a las monjas, pese a la inversión que hicieron.

- ¿Cómo se conocieron las monjas y Pablo de Rojas?

- Nos conocieron a través de las redes sociales y al leer nuestra página web. Vieron un poco lo que decimos, lo que no decimos, y se pusieron en contacto con nosotros.

- ¿De Rojas es el benefactor al que se refiere la Iglesia?

- ¡Que eso se lo inventan para lanzar una cortina de humo! Está haciendo todo tipo de tejemanejes.

- ¿Quieren montar en Orduña la iglesia de la Pía Unión de San Pablo Apóstol?

- ¿Pero qué iglesia? El monasterio de Orduña lo compraron las monjas en 2020 y entonces no las conocíamos.

- La Iglesia dice que son una secta.

- No les hago caso. Es como si dicen que también lo son los protestantes, ortodoxos, anglicanos o los Testigos de Jehová.

- Les compara con El Palmar de Troya.

- No tenemos nada que ver con ellos. Es la excusa más barata para desprestigiarnos.

- Todo parece reducirse al final a un asunto de mucho dinero.

- Es que es un asunto de mucho dinero. Iceta se quiere quedar con los inmuebles de Belorado, Derio y Orduña para venderlos luego, sin darles nada a las monjas.

- ¿Qué parentesco le une a Pablo de Rojas?

- Que somos del mismo pueblo, de Linares.

- ¿Son primos?

- No sé de dónde salió eso.

- ¿Sigue preparando de vez en cuando algún cóctel?

- Pues no tengo mucho tiempo, pero las monjas me han dicho más de dos veces que les tengo que preparar un combinado. Ellas hacen trufas de mojito, y nos reímos muchísimo. Cuando estemos más tranquilos, les haré uno.

- ¿Cuál?

- Un Gin Fizz. Me encanta y es muy fresco. Con ginebra, zumo de limón, azúcar, clara de huevo y un poquito de soda.