Los hombres matan siete veces más a sus parejas que las mujeres

Los hombres matan en España a sus esposas o exparejas siete veces más que las mujeres a sus maridos o excompañeros. Así lo certifica el informe elaborado por el Observatorio contra la Violencia de Género tras analizar los crímenes en la pareja registrados en 2023, una conclusión que de nuevo deja sin argumentos a quienes aún hoy se empeñan en llevar la contraria a las leyes y al Tribunal Constitucional y aseguran que la violencia machista es un invento y que todas las agresiones en el ámbito de la pareja son simple violencia doméstica, por lo que hay que tratarlas por igual, sin mirar qué sexo las comete.

El órgano dependiente del Consejo General del Poder Judicial destaca que el 86,5% de los crímenes del año pasado fueron obra de varones y el 13,4% de mujeres. El documento recoge que mientras 58 mujeres perdieron en 2023 en España la vida a manos de sus compañeros sentimentales presentes o pasados, ellas mataron a nueve de sus parejas. Los fallecidos tenían una media de 50 años, ellos, y 43 años, ellas, y en la mayoría de las ocasiones, tanto en unos casos como en otros, el arma letal fue un cuchillo. En resumen, un asesinado en la pareja cada dos meses y más de una muerta por semana. No es un hecho puntual. La desproporción de la violencia extrema entre sexos es casi idéntica a la de los últimos trece años. Cerca del 88% de las muertes en pareja causadas por los hombres y poco más del 10% obra de mujeres. El 1,5% y el 0,4% restantes son crímenes entre gais y entre lesbianas, respectivamente.

Otros tres elementos más destacan en el análisis del CGPJ sobre los crímenes del año pasado. El primero es que la franja de edad de la mayoría de las asesinadas oscila entre los 26 y los 45 años. Lo que quiere decir que en esas edades los criminales machistas matan el doble que el resto. La proporción es sencilla si se tiene en cuenta que tienen esos años seis de cada diez de las víctimas de 2023, el 58,7%%, cuando a esas generaciones solo pertenece en España un tercio de las mujeres mayores de 15 años.

El año pasado un número sustancial de las víctimas de género, más de la mitad, el 55,2%, dejó huérfanos menores de edad, un 17% más que la media de la década anterior, en la que las asesinadas con hijos pequeños o adolescentes rondó el 47%. Estos huérfanos, en casi siete de cada diez ocasiones, son hijos del propio agresor.

Un tercer elemento que se salió de lo habitual es que en 2023 el 44,8% de las asesinadas por sus parejas o exparejas procedían de otros países, nueve más que el año anterior, y lo que supone un incremento del 25% sobre la media de la última década, cuando el porcentaje de muertas extranjera rondó el 35%. El país de origen con más víctimas, seis de las veintiséis inmigrantes, es Marruecos, seguido de Colombia, con tres fallecidas.