La erupción del volcán de La Palma ya es la más larga de la historia en la isla

La lava cubre 1.223,5 hectáreas, según los datos actualizados del satélite Copernicus, y ha destruido 2.896 construcciones y casi 400 hectáreas de cultivos. Aunque con visos de remitir en su intensidad, en los últimos cuatro días ha cubierto más de 11 hectáreas de nuevas extensiones de terreno. No obstante, la mayoría de la lava se desliza por tubos volcánicos creados por las coladas iniciales y las más recientes.

A diferencia de lo ocurrido estos días en Indonesia, donde han perdido la vida 45 personas por la erupción del volcán Semeru, en Canarias no hay víctimas mortales –aunque un caso se encuentra en investigación–, gracias a la evacuación de más de 7.000 habitantes de las zonas afectadas. De hecho, los desplazados de la parte norte del Cumbre Vieja podrían volver a sus viviendas, indicó el director técnico del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende en una rueda de prensa. En el sur, sin embargo, los gases contaminantes todavía afectan la zona sur, por la gran emisión de gases de las coladas. Ayer hubo altas concentraciones de dióxido de azufre (SO2) y dióxido de carbono (CO2), según el Pevolca.

En total, en estos meses, el volcán ha creado una docena de coladas, con hasta 3.350 metros de anchura, algunas que llegan hasta el mar, creando un delta lávico de 48,3 hectáreas. Con 15 seísmos, todos de baja intensidad, el sábado, se ratifica que pierde fuerza aparentemente, ya que llegó a alcanzar 330 terremotos en un solo día.