Alimentos y mechones solidarios

El equipo 'Crepta Girls', de 6º de Primaria del CEIP La Guindalera -finalista también en otras dos candidaturas-, realizó un interesante vídeoreportaje sobre el Banco de Alimentos. Eva Amat, Carlota Bedia, Paula Fernández, Rebeca Romosán y Teresa Tejada se coordinaron «muy bien y con total responsabilidad sobre su trabajo», como indica su tutor, Diego Martínez. «Todo el trabajo y el mérito ha sido suyo, les hemos orientado en algún momento concreto, pero ellos han escogido los temas, se han documentado y han elaborado los artículos de forma totalmente autónoma», comenta. «El objetivo era que resolvieran los problemas que les surgían y aprendieran». El tío de una de las integrantes del grupo trabaja en el Banco de Alimentos y así surgió la idea central del reportaje, que elaboraron y subieron a la web, distribuyendo los trabajos entre todas para avanzar de forma coordinada. El formato de vídeo, el que han escogido para este artículo, ha sido uno de los que más les han motivado por su carácter digital y audiovisual.

Ampliar

El vídeo también fue la opción elegida por el equipo del Colegio Sagrado Corazón, 'J Times Ñoticias', que completaron con reportaje y transcripción en texto. Álvaro Bañares, el tutor del grupo, explica que la participación del centro en Reportero Escolar es una tradición que pasa de año a año entre los alumnos, que están deseando participar. En este caso Isabel Chandro, Malena Jometón, María Recio, Lucía López y Rodrigo Sáncho elaboraron un artículo muy completo titulado 'Mechones solidarios. Juntos fabricamos sonrisas' y en el que contaban la historia de una asociación benéfica que recoge donaciones de pelo para hacer pelucas para personas enfermas. «Como los alumnos ya habían participado en el concurso el año pasado, trabajaron de manera muy autónoma», destaca Álvaro. «Se enteraron de que unas compañeras habían colaborado con esta asociación, les pareció interesante y quisieron hablar sobre ello». Algunas actividades se hicieron en el centro escolar, pero también hubo otros temas que implicaron salidas, como la visita a la Cocina Económica, en las que ejercieron como auténticos periodistas y fueron atendidos muy amablemente por los entrevistados. Lo que más costó, en muchos casos, fue la labor de documentación previa, algo a lo que no están acostumbrados. También el artículo de opinión fue complejo, porque les obligaba a tomar postura y para ello tenían que justificar y apoyar el texto con argumentos. «Están muy contentos con el premio porque supone un reconocimiento, una recompensa a su esfuerzo», concluye el tutor.