Condenado por cobrar la pensión de su abuelo muerto durante 16 años

Por si fuese poco, el empleado público decidió ayudar a una allegada que estaba pasando por problemas económicos con otra carambola administrativa: «Procedió a rehabilitar una pensión de viudedad que había sido dada de baja por fallecimiento de su beneficiaria a la que sustituyó por dicha amiga, que a partir de ese momento comenzó a percibir una pensión de viudedad. Del mismo modo procedió a rehabilitar una pensión de orfandad en beneficio del hijo de esa amiga percibiéndose indebidamente las pensiones por parte de aquella. El importe total percibido fue de 13.263 y 5.147,40 euros, según los hechos probados», explica el Consejo General del Poder Judicial en un comunicado.

Desafortunadamente para el funcionario de Zamora, sus chanchullos fueron descubiertos. El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León confirmó una primera sentencia de la Audiencia de Zamora a 7 años y 3 meses de prisión por delitos de estafa en concurso con falsedad en documento mercantil y delito de fraude a la Seguridad Social, pero el Tribunal Supremo ha estimado parcialmente el recurso que interpuso el funcionario y ha rebajado hoy esa sentencia a 5 años y 7 meses de prisión, y una multa de 600.000 euros.

Los jueces aducen que existe una continuidad delictiva entre todas las acciones del acusado y que, por ello, deben englobarse en un delito de defraudación de prestaciones en concurso con falsedad. Por su parte, la amiga que se benefició de las pensiones de viudedad y de orfandad también fue condenada a 1 año y 10 meses de cárcel por la Audiencia de Zamora. Como no recurrió aquella sentencia, no se ve afectada por la resolución del Supremo, así que ambos acusados deberán indemnizar solidariamente a la Seguridad Social con 19.259 euros adicionales.