J. M. L.
Toledo
Sábado, 17 de febrero 2024, 16:07
La profesión de maestro puede parecer idílica –trabajar con niños, amplios períodos de vacaciones…- pero el día a día a veces es complicado y acaba con los nervios del profesor más calmado. En Puertollano (Ciudad Real), una maestra ha sido condenada a pagar una multa ... de mil euros por haber abofeteado a un alumno de cuatro años que colmó su paciencia por su mal comportamiento.
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Los hechos ocurrieron en el colegio público Ángel Andrade en mayo de 2022. La profesora, harta de la actitud del menor, reaccionó propinándole un tortazo al niño. Para asegurar que la bofetada tendría el efecto deseado, le agarró los brazos con la otra mano. Como consecuencia del golpe, el niño sufrió un hematoma en un pómulo y una ligera excoriación en el cuello. Sus padres llevaron al niño al servicio de Urgencias del Hospital Santa Bárbara, de Puertollano, y después decidieron denunciar los hechos en los tribunales que ahora les ha dado la razón. Más tarde, los padres acordaron cambiar al niño de centro escolar.
Dos años después, la Audiencia Provincial de Ciudad Real ha emitido una sentencia condenando a la maestra por un delito leve de lesiones. La resolución judicial reconoce que el comportamiento del niño no era el más adecuado, pero considera que la reacción de la docente no tiene justificación alguna. La madre del niño, además, acudía habitualmente a este colegio -construido en los años 50 del siglo pasado ante el aumento de población de Puertollano- para tratar de resolver los problemas de conducta de su hijo.
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