La Comunidad Valenciana, sexta autonomía que prohíbe los circos con animales

Desde este jueves, la Conselleria de Medio Ambiente valenciana abrirá expediente sancionador si algún Ayuntamiento incumple la prohibición.

La normativa valenciana se introdujo mediante una enmienda a la ley de Acompañamiento a los Presupuestos de la Generalitat para 2019 presentada por el PSPV-PSOE y Compromís, en la que se remitía su entrada en vigor al 31 de enero de 2019 para dar tiempo a un circo a acabar de ofrecer el espectáculo que tenía autorizado.

La diputada de Compromís Cristina Rodríguez, impulsora de esa enmienda, ha explicado que Les Corts ya aprobaron hace meses por unanimidad una proposición no de ley para prohibir los circos con animales salvajes, aunque ese acuerdo no se había materializado en ninguna ley.

Rodríguez ha precisado que la intención era incluir esa prohibición en la futura ley valenciana de protección animal, de la que ya existe un anteproyecto que se ha consensuado con colectivos animalistas, si bien el poco tiempo que queda para que finalice la legislatura hace probable que no se pueda aprobar antes de que termine.

Por ello, se optó por incluir en la ley de Acompañamiento a los Presupuestos de la Generalitat para este año esa medida, referida a todos los animales y de la que ha dicho que en los circos ya están «concienciados», pues de hecho muchos cuentan con un espectáculo con animales y con otro sin ellos, ha dicho la diputada.

InfoCircos, una coalición de cinco entidades de protección animal que se creó en 2013, está planteando a los Gobiernos y a los Parlamentos autonómicos que impulsen cambios legislativos para que se vaya prohibiendo y limitando el uso de animales en los circos, ya que el bienestar animal es una competencia autonómica.

Su coordinadora, Marta Merchán, ha manifestado que en España quedan muy pocos circos que utilicen animales, «no más de media docena», los cuales cuentan con una «doble programación», con animales y sin ellos, en función del lugar en el que actúen.

Ha precisado que en España hay casi 500 municipios donde no se permite el uso de animales en los circos, entre los que se incluyen la mayoría de localidades más pobladas.

Según Merchán, la tendencia en muchos circos ha sido dejar de tener animales propios y alquilar por temporadas números con uno o varios animales y su domador, por lo que en el momento en que se prohíban en toda España «simplemente tienen que dejar de alquilarlos».

Ha precisado que, además, a los circos se les ofrece la posibilidad de llevar a sus animales a un centro de animales salvajes que la fundación AAP Primadomus tiene en Villena (Alicante), donde en el último año y medio tres circos que utilizaban animales los han recolocado allí.