El coche de Óscar S., amigo de Esther López, llegó a la Guardia Civil sin la abolladura

La defensa de Óscar S. M. había solicitado a la magistrada instructora el cotejo de estas imágenes al sostener que cuando el coche de su patrocinado fue requisado por los investigadores del caso para una segunda inspección en profundidad no presentaba ningún impacto en la zona derecha superior del paragolpes. Además reclamó que, en el caso de comprobarse que la abolladura se produjo después de que el coche fuera puesto bajo la custodia de la Benemérita (es una prueba fundamental del caso), se solicitara por parte de la jueza explicaciones a la Guardia Civil.

El informe del Equipo de Reconstrucción de Accidentes en el que se realiza una recreación del posible atropello de la joven de Traspinedo indica en su página 47, que se ilustra con una foto del coche, que las abolladura se producen normalmente como consecuencia «de un golpe con una fuerte compresión» y en este caso, exponen, «se observa una leve abolladura, un pequeño impacto (deformación) en material plástico por compresión mediante una fuerza exterior aplicada con dirección oblicua en la parte exterior derecha de la zona superior del paragolpes que provoca un escalón en la línea de unión con la propia aleta». Concluye la descripción con que «se trata de un leve hundimiento en la parte plásitca formando una zona convexa, una curvatura hundida hacia dentro».

Este y otros desperfectos localizados en la parte delantera del coche serían compatibles con las lesiones que presentaba Esther López en las extremidades inferiores descritas por el informe de la autopsia, que ha sido fundamental para la simulación del atropello. La víctima habría sufrido un primer impacto inicial en la parte superior del muslo izquierdo, «una lesión más acusada y de mayor lesividad que la producida sobre la extremidad derecha«. El informe del ERAT hace suya la conclusión de los forenses: »se requiere de una fuerte energía para provocar la rotación de la cadera que desencadena en la luxación, saliéndose la cabeza del fémur del cotilo. Por la zona en la que recibió el golpe en el muslo y lo que medía Esther (más los tres centímetros del tacón de sus botas)», que en ese momento del atropello se encontraría de pie, «se verifica la compatibilidad con la altura del borde superior de la rejilla y el capó del motor del vehículo Volkswagen T-Roc».

La jueza instructora del caso decidirá si, tras cotejar las imágenes, pide explicaciones a la Guardia Civil sobre qué pasó con el coche mientras ha estado custodiado en la Comandancia y si ello, como persigue la estrategia de la defensa de Óscar S., invalida el informe de Tráfico, que es esencial para sostener la acusación contra el principal sospechoso, para quien la familia de Esther López acaba de solicitar que se le impongan medidas cautelares ante los indicios recabados por los investigadores.

«Es surrealista que no tenga medidas cautelares, puedo ir por la calle y encontrarme con él». Inés López, en una entrevista concedida este lunes al Programa de Ana Rosa, ha afirmado que su hermana «no se bajó del coche» de Óscar S. M. En sus declaraciones ha apuntado que «queremos creer que a esto le falta muy poquito», en alusión a la proximidad de un desenlace en la investigación que lleva a cabo la Guardia Civil desde que su padre denunció en el puesto de Tudela la desaparición de Esther, cinco días después de que la joven saliera de su casa para ir a ver el partido de la Champions a un bar del pueblo. «Claro que hay una persona y su nombre está en la cabeza de todos», ha subrayado respecto de quien la familia y la Guardia Civil consideran que es el responsable de la desaparición y muerte de la vecina de Traspinedo.