Buscan la localidad de donde procedía la bebé hallada en el ecoparque de Cáceres

«Todos estamos muy afectados, pero estos trabajadores lo están especialmente porque son los que vieron el cuerpo del bebé muerto y los que de forman inmediata pulsaron el botón que paró todo el ecoparque», ha explicado este martes Fernando Grande, alcalde de Mirabel. «Hablé con ellos nada más conocer la noticia y estaban consternados, ha sido un golpe muy duro».

Un hecho doloroso y extraordinario en una planta propiedad de Gespesa que desde enero de 2021 gestiona Urbaser, con medio centenar de trabajadores. «Estamos impactados, nunca antes se había producido nada igual», reconocía uno de los empleados del ecoparque.

La Guardia Civil ha asumido la investigación de un caso que instruye el Juzgado de primera instancia número 1 de Plasencia y sobre el que se ha decretado secreto de sumario.

La causa de la muerte de la recién nacida será determinada por el Instituto Anatómico Forense de Cáceres, donde le ha sido practicada la autopsia, mientras la Policía Judicial de la Guardia Civil busca la localidad en la que la bebé fue arrojada a un contenedor de basura tras su nacimiento. Fuentes consultadas creen que la pequeña podría haber nacido poco más de 24 horas antes de ser encontrada en la cadena de triaje del ecoparque.

Según ha podido saber este periódico, hasta esta instalación de Mirabel llegó en un contenedor verde, destinado a basura orgánica, y probablemente en la mañana del mismo lunes, solo horas antes por tanto de que se encontrara su cadáver.

No obstante, y a pesar de que son 96 las localidades del norte cacereño que llevan sus basuras al ecoparque de Mirabel, el funcionamiento de la planta puede ayudar a encontrar el lugar de procedencia del contenedor en el que llegó la recién nacida.

Aunque las labores de triaje no se realizan durante el fin de semana, cuando siguen llegando igualmente los camiones de basura al ecoparque, el reciclaje de estos restos fue realizado por el turno que comenzó a las 7 de la mañana del lunes. Este día se destina en la planta al reciclaje de la basura orgánica, que se deposita en una 'playa de descarga' diferente a la destinada a la basura inorgánica, la que llega en los contenedores amarillos. Es el motivo por el que se sospecha que fue en la mañana del mismo lunes, y no durante el fin de semana, cuando llegó el cadáver de la recién nacida a la planta en un recipiente verde. Y ese día ni llegan basuras de todas las localidades ni en todos los casos son restos orgánicos.

El cadáver de la bebé fue depositado primero en la 'playa de descarga' y pasó por dos procesos de selección mecánicos antes de llegar a la cinta de triaje. Primero por el que separa los volúmenes grandes de los pequeños. Después, por el que diferencia entre materia orgánica e inorgánica, pero siempre que el residuo en cuestión sea inferior a 80 milímetros. «A la cadena de triaje llegan objetos densos entre 80 y 300 milímetros y esto es lo que hizo que el cuerpo apareciera en la cinta», aclararon desde el ecoparque.

Urbaser tiene registro de la hora de llegada de cada camión y de la localidad de procedencia del mismo. Datos que ha facilitado ya a la Guardia Civil y que podrían ayudar a determinar la población en la que se produjo el suceso y encontrar a sus responsables.

«Confiamos en que se localice a los autores de esta barbaridad», dice Fernando Grande. «En el pueblo estamos todos consternados, el suceso ha provocado una ola de indignación». Tanto es así que Mirabel se concentró a la una de la tarde de este martes en la plaza del pueblo para mostrar en silencio su repulsa por lo ocurrido.

«Una mujer puede estar desesperada y no querer a su bebé, pero es inhumano atentar contra una vida, podía haber buscado otra solución», lamentó Meri Lino, responsable del bar del centro social de Mirabel donde este martes no se hablaba de otra cosa. «Es muy doloroso lo ocurrido, sentimos pena y lástima, pero también rabia; ojalá se encuentre a quienes han tirado a una recién nacida a la basura», zanja Pilar Bohoyo, vecina del pueblo.