Acusan a un aparcacoches de intentar abusar de dos menores en Málaga

Los hechos se remontan al 14 de julio de 2019. El 'gorrilla' se encontraba en las inmediaciones de la carretera de Almería, junto a una de las gasolineras Repsol de El Candado, cuando se percató de la presencia de los dos menores. Tras la proposición sexual que supuestamente les hizo el acusado, los dos adolescentes corrieron hasta su casa y se lo contaron a sus padres, quienes pusieron los hechos en conocimiento de la Policía Nacional.

Los agentes investigaron el caso y detuvieron al aparcacoches, a quien intervinieron un móvil de la marca Xiaomi. Los policías pidieron autorización al juzgado para examinar el terminal. En el teléfono, los investigadores descubrieron varias conversaciones entre el individuo y un amigo, que también se sentará en el banquillo, relativas a prácticas sexuales y vídeos de pornografía infantil que éste último habría enviado al primero.

Tras ser puesto a disposición judicial, en julio de 2019, el hombre reconoció los hechos y pidió que le castraran químicamente. El juez decretó su ingreso en prisión provisional a la espera de juicio, que se celebra este miércoles.

Los médicos forenses han estudiado su personalidad y han concluido que sufre un trastorno de la personalidad pedófilo, con rasgos «histriónicos, obsesivos, compulsivos», según el escrito de acusación. Sin embargo, advierte el fiscal, en relación a los hechos «no existe patología psiquiátrica de carácter enajenatorio y no hay merma de sus facultades cognitivas y/o volitivas», por lo que entiende que era consciente de lo que hacía y era capaz de controlar su voluntad.

El fiscal pide que el aparcacoches sea condenado a cinco años de cárcel por corrupción de menores y dos más por tenencia de pornografía infantil. Para su amigo, el segundo acusado, solicita una pena de cuatro años porque, además de poseer pornografía, la habría distribuido. También pide que los acusados permanezcan en libertad vigilada durante tres años y que realicen un curso de educación sexual y control de los impulsos, así como una prohibición de comunicarse con menores a través de redes sociales.