Absuelto tras dos condenas por agresión sexual a una niña de acogida en Cáceres

El caso es insólito porque se ha juzgado hasta tres veces en la Audiencia Provincial.

El largo procedimiento judicial empezó en febrero de 2018, cuando una joven saharaui de 17 años dijo al orientador del Instituto de Enseñanza en el que estudiaba en Cáceres, que de niña había sido víctima de agresiones sexuales cuando viajaba la ciudad con el programa 'Vacaciones en Paz'.

Ella llegó por primera vez a Cáceres de vacaciones en el verano de 2010, con nueve años. Durante cinco años, hasta el 2015, residía los dos meses de verano con la misma familia de Cáceres, que se quedó con ella también en el curso escolar 2014-2015.

La joven aseguró que cuando tenía entre 10 y 13 años le agredió sexualmente el cuñado de la madre de acogida. Cuando estaban a solas le hacía tocamientos en el culo y los pechos, y una vez le tocó la vagina por encima de la ropa.

El acusado fue procesado y juzgado en la Audiencia Provincial de Cáceres en marzo de 2020. Le encontraron culpable y fue condenado a cinco años y un día de prisión, siete años de libertad vigilada y a indemnizar a la joven con 30.000 euros. La supuesta perjudicada no acudió al juicio, donde se mostró un vídeo en el que contaba su versión.

La defensa se quejó ante el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura y pidió que declarara la joven en el juicio ya que era mayor de edad. Le dieron la razón y se ordenó repetir la vista oral en la Audiencia con un tribunal diferente.

Nuevo juicio

El segundo juicio se celebró en febrero de 2021. La presunta víctima declaró por medio de un teléfono móvil desde un campamento saharaui. El procesado volvió a ser condenado a cinco años y un día de prisión y a indemnizar a la joven con 30.000 euros.

«Nosotros volvimos a quejarnos al Tribunal Superior de Justicia de Extremadura –indica el abogado David Cascón, que llevó la defensa junto con la letrada Ester Toledano– porque había dudas de que fuera ella la que declaraba por la documentación que presentó, y prestaba el testimonio desde un teléfono móvil, sin saber quién estaba con ella, si la estaban coaccionando con el objetivo de conseguir el dinero».

El TSJ les volvió a dar la razón y el tercer juicio, con un tribunal diferente, se realizó en noviembre de 2022, pero se tuvo que suspender por no comparecer la joven. El nuevo señalamiento fue en el mes de mayo de 2023 y no compareció la supuesta víctima. Se celebró el juicio y el acusado fue absuelto. Se recurrió la absolución, y el pasado 6 de octubre la Sala de lo Civil y Penal del TSJ la ha confirmado.

«No ha sido recurrida – afirma Cascón–. La absolución es firme y ya podrán descansar nuestro cliente, su mujer y sus hijos, que lo han pasado bastante mal».