Las normas de tráfico más extravagantes del mundo

En primer lugar, surge la duda de cuál es el atuendo más recomendado -e, incluso, cuál es el legal- a la hora de sentarse al volante. Por ejemplo, en el estado de Kentucky (Estados Unidos) las mujeres solo podrán conducir en traje de baño si llevan con ellas un objeto de defensa personal, o si viajan acompañadas de dos policías. Por su parte, en Alemania el coche es considerado un espacio personal, así que, si se quiere, se puede conducir hasta desnudo. Conducir descalzo, sin embargo, puede suponer la pérdida de la cobertura de la póliza, aunque legalmente no supone una infracción.

El tema de los seguros también resulta llamativo en Islandia, donde las agencias locales recomiendan -y ofrecen- contratar pólizas contra posibles daños provocados por la ceniza volcánica o los vientos arrasadores.

Otra de las cuestiones que más suelen preocupar a los conductores es la ubicación de vías de servicio en las que poder repostar y, de paso, hacer una visita a los servicios. En Inglaterra, si no es posible aguantarse las ganas, no hay ningún problema. Los conductores tienen permitido miccionar al lado de la autopista, siempre y cuando lo hagan junto a la rueda trasera del coche y no aparten la mano derecha del vehículo.

Y viajar con animales no es algo a tomar en consideración solo a la hora de elegir hotel, sino que, en Italia, por ejemplo, los perros deben ir montados en el vehículo con el cinturon puesto, y en Alemania, todas las mascotas se consideran objetos de carga y sus dueños tienen que asegurarse de que poseen protección adecuada contra resbalones o caídas. De nuevo en Estados Unidos, esta vez en el estado de Minnesota, parece estar permitido transportar gorilas en el coche, pero únicamente si van sentados en el asiento del pasajero. Y, aunque los camellos no quepan dentro de un turismo, de ir hasta los Emiratos Árabes uno no puede olvidarse de que allí estos animales gozan de derecho de paso en la vía pública, por tratarse de un importante símbolo de estatus. Respecto a Croacia, nada se menciona en el estudio sobre las mascotas, pero lo que sí está prohibido es portar en el vehículo un recipiente con combustible adicional.

China es uno de los países que más complicado se lo pone a los turistas para conducir -cualquiera que sea el coche, cualesquiera que sean las circunstancias- ya que, aunque dispongan de un carné internacional, deben obtener un permiso específico emitido en el país, para el cual deben superar un examen de teoría cuya obtención dependerá del ritmo de emisión institucional.

Y para finalizar, no podía faltar una mención a los agentes de tráfico austriacos, que han de preocuparse de tener la vista entrenada para calcular la velocidad, ya que se les permite usarla para calcular excesos de hasta 30 km/h sin necesitad de comprobar las imágenes de una cámara o radar a la hora de expedir una multa.