Profesionales bajo cualquier tipo de piel

El pasado mes de noviembre, la fotógrafa Mai Oltra reflexionaba sobre este asunto en la muestra 'Writen In InK' (escrito con tinta). El contenido de la exposición se componía de varios retratos de personas mostrando su cuerpos como lienzos. Tatuajes que a diario deben de ocultar bajo la ropa en su entorno laboral.Y es que aunque este modo de expresión sobre la piel ya no sea cosa de gente de mal vivir, aún sigue existiendo cierta presión social para mostrarlos libremente.

El fotógrafo freelance Óscar Quetglas va más allá, y propone un experimento para identificar cuánto pesa el aspecto en los profesionales. En colaboración con el tatuador José Juan Real, de Laureato Tattoo Studio, han creado un proyecto fotográfico que persigue eliminar el prejuicio hacia la gente con la piel tatuada.

Las apariencias engañan es el nombre de su proyecto bajo el lema «¿Cuál es la diferencia?». Se trata de mostrar una serie de imágenes en las que aparecen personas reales de dos formas diferentes: una con la ropa de trabajo y otra mostrando sus tatuajes. Tal y como cuenta Quetglas, el objetivo es «concienciar a la gente que llevar tatuajes no te hace menos profesional, y desde luego, tampoco peor persona. La gente con prejuicios esta mas predispuesta a tratar con otras personas si no ve los 'tattoos', aunque luego la realidad le muestre que ese profesional en el que ha confiado en realidad tiene su brazo o su espalda como un lienzo».

Los personajes son profesionales de varios sectores. Hay policías, osteópatas, farmacéuticos o comerciales. Todos ellos dejan de ser lo que parecen cuando se quitan algo de su vestimenta habitual.

«Antes de empezar queríamos saber hasta que punto la gente estaría dispuesta a participar. Así pues, y para ver la repercusión, me usé a mi mismo como conejillo de indias, ya que con mi espalda completa recién terminada y mi foto en camisa y corbata por mi profesión -Diseñador gráfico- pensé que podría ser un claro ejemplo de lo que queríamos», relata Óscar Quetglas.

Colocó la imagen en Facebook junto la etiqueta #Lasaparienciasengañan y los comentarios no tardaron en llegar. Así, cada viernes desde enero el fotógrafo mallorquín sube un nuevo modelo al álbum de la conocida red social. Al principio cuenta Óscar que la idea era la de una publicación semanal y con una duración mínima de un año. Él pensaba que se quedaría en «algo a nivel local o nacional», pero en febrero «las imágenes llegaron a distintas partes de Sudamérica» y la página de Facebook pasó de unos pocos miles de visitantes, a superar los cuatro millones. Las interacciones superaban los 2,5 millones y la galería del proyecto, que por aquel entonces contaba con apenas seis imágenes, ya había sido compartida más de 30.000 veces.

Ahora cuentan con una larga cola de gente que les escribe para poder aparecer en el proyecto, y por el que se han interesado además varios personajes públicos como Toni Moog, humorista de la Paramount Comedy, el piloto de Moto2 Luis Salom o Betty Ayala, locutora de radio de Rock FM en Mexico.

Y es que quizá su médico también vaya tatuado, o el señor que le atiende en la sucursal bancaria. Sí, es posible que también. Porque aunque lleven en la espalda un dragón, peces koi o varias calaveras, seguirán siendo igual de profesionales que antes.