La ONU pide al Gobierno que no modifique la ley del aborto

Ese apartado es el que quiere eliminar el grupo de expertos de la ONU sobre la discriminación de las mujeres, que durante diez días ha estudiado la situación del país. Pero este grupo, encabezado por Frances Raday, quiere que el Ejecutivo sea también más contundente con los posibles embarazos que se produzcan en las menores de 16 años. Nos han dicho (el Gobierno) que es algo díficil, el derecho de los padres y las familias. ¿Y si hay casos de incesto?, se ha preguntado la jefa del grupo de trabajo.

Esta unidad de Naciones Unidas ha constatado, según su informe, la enorme diferencia que existe entre las leyes y la realidad. Mientras que aplaude al conjunto de normas y leyes que se han realizado para evitar la discriminación de la mujer en la sociedad española, su ejecución deja mucho que desear.

Se ha demostrado que la respuesta de los trabajadores sociales, la Policía, los fiscales y los tribunales, y su sensibilización y capacitación en materia de género, no han sido adecuadas, señala Eleonora Zielinska, otra de las cinco miembros de este grupo. La violencia de género está profundamente arraigada en la cultura machista y las actitudes patriarcales que se reproducen en los medios de comunicación e internet, y que influyen en particular, el comportamiento de los jóvenes, incide la experta polaca.

Asimismo, el estudio incide en que a pesar de considerables esfuerzos desplegados, la prevalencia de la violencia machista sigue siendo alarmante, con 125.000 casos comunicados el año pasado y una continuación de asesinatos trágicos de mujeres y niños. En 2013, 54 mujeres fueron asesinadas, algunas a pesar de las reiteradas peticiones de la mujer para su protección y la retirada de los derechos de visita o custodia, recuerda el informe.

Raday también ha indicado que las políticas de igualdad en esta época de crisis han tenido un diferente camino durante estos años. Mientras que algunas comunidades han mantenido los mimos servicios, otras han recortado los servicios. Sobre todo, cuando las personas necesitadas se han multiplicado, añade Raday.