El Haro da la cara

principal candidato al ascenso, el Sanse, pero hizo disfrutar a los cerca de cien aficionados que se congregaron en el pabellón Valvanera. Las riojanas dieron la cara en todo momento, fueron un digno rival para el equipo madrileño y sólo la mayor experiencia de las locales les privó de los dos

puntos.

Salió sin ningún complejo el equipo dirigido por Hugo Gotuzzo y, desde los primeros puntos, se vio que el Sanse, por primera vez esta temporada, tenía un rival serio sobre su cancha. El Haro no había venido de visita. La derrota entraba dentro de lo posible y esta ausencia de presión repercutió positivamente en el conjunto azul.

Lejos de caer en la falta motivación, las riojanas no se dejaron impresionar por el potencial de las locales y jugaron con descaro y valentía. Perfectamente pudieron llevarse el primer set pero su buen juego no consiguió reflejarse en el luminoso.

En el segundo set la jarreras siguieron a lo suyo: perfectas en la recepción y arriesgando en cada punto. La apuesta por el juego vertiginoso esta vez dio sus frutos. En la tercera bola de set el Haro ganaba el punto definitivo y empataba el partido. Aplausos en la cancha del Sanse al Haro en reconocimiento a su juego vistoso y alegre. En los dos siguientes sets el mayor poso de las jugadoras madrileñas decantó el partido a su favor. El Haro luchaba cada punto. Con Luciana Branco comandando la posible proeza, el equipo visitante buscaba las cosquillas a las curtidas jugadoras sanseras. Su ruidosos seguidores disfrutaban del espectáculo. Pero las posibilidades de ataque se agotaban con el paso de los minutos, Melisa Callo y Lilian Ferreira no encontraron resquicio para rematar con acierto, bien cubiertas por las jugadoras locales.

Un ataque poco fluido e inoportunos errores en los momentos claves del encuentro dieron alas a las madrileñas que aprovecharon su mayor sobriedad para resolver el encuentro a su favor.