'Yo, Tonya', la princesa de América que no pudo reinar
ESTRENOS ·
'Yo, Tonya', la biografía sobre la estrella del patinaje sobre hielo protagonizada por Margot Robbie es candidata a tres Premios OscarSecciones
Servicios
Destacamos
ESTRENOS ·
'Yo, Tonya', la biografía sobre la estrella del patinaje sobre hielo protagonizada por Margot Robbie es candidata a tres Premios OscarUna de las mejores patinadoras del mundo en los años 90 no conseguía patrocinios, tenía que trabajar de camarera entre entrenamiento y entrenamiento para poder sobrevivir. Ser la primera mujer estadounidense en completar un salto de triple axel en competición no fue proeza suficiente para ... que obtuviese respaldo en su carrera ascendente en el patinaje artístico sobre hielo. ¿La razón? Su imagen de América al mundo no era la apropiada.
'Yo, Tonya' es la historia de Tonya Harding, cuya agitada vida personal y su auge y caída en el deporte da para mucho en un biopic acelerado, cargado de matices, que parece rodado por Martin Scorsese.
Craig Gillespie, hasta ahora un realizador del montón ('Cuestión de pelotas', 'El chico del millón de dólares'), se ha puesto las pilas para afrontar un encargo con mucha miga. En sus manos la radiografía de una perdedora deviene una atractiva película biográfica que se fusiona en su tramo final con el thriller, en un tono de tragicomedia negra, empleando varias texturas visuales, incluyendo el VHS, para dar forma a una recomendable producción cuyo libreto estuvo en la famosa 'black list' de Hollywood.
Margot Robbie, la supervillana Harley Quinn en la terrible 'Escuadrón suicida', encarna a la protagonista, defendiendo un rol complicado, convenientemente caracterizada, con nota alta (está nominada al Oscar). A pesar de su carácter agrio es difícil no empatizar con una mujer maltratada por su excéntrica madre –mayúscula Allison Janney, Globo de Oro a la mejor actriz de reparto, en la piel de una señora egoísta y maleducada- y un marido impresentable, un abusador con pinta de no haber roto un plato, los peores, al que pone cara Sebastian Stan.
La violencia doméstica marca la existencia de Tonya, obsesionada con ser la mejor en lo suyo porque siente que es la única manera de ser feliz. Pero el éxito es un arma de doble filo y es fácil caer una vez estás arriba, sobre todo si tus semejantes se empeñan en que así sea, exprimiéndote al máximo. «América necesita alguien a quien amar y alguien a quien odiar», se dice en la propia película, la crónica de un fracaso, quizás injusto, el de una princesa que no puede huir de su condición de paria en el país de las barras y estrellas.
'Yo, Tonya' emplea varios formatos, hay insertos documentales de entrevistas a los protagonistas, recreadas a partir de imágenes reales, algunas de las cuales pueden verse en los créditos finales (el documentado guión se apoya en diversas fuentes de archivo que integra hábilmente en la acción). Resulta llamativo lo bien que se rompe la cuarta pared en algunos momentos, con los actores hablando a cámara, al público, enfatizando momentos cómicos o choques entre el pensamiento de los personajes y lo que ocurre en la realidad. Hay toques grotescos que aportan frescura a una trama que fluye con solvencia.
La banda sonora, con clásicos de la época, es otro de los hallazgos de 'I, Tonya', acusada de cierta frivolidad, no sin razón, a la hora de tratar un tema tan espinoso como es el maltrato. Un revalorizado Gillespie, culpable del innecesario remake de la cult-movie 'Noche de miedo', filma las secuencias de patinaje con un poderío resaltable, acompañado por temas musicales que enfatizan el dinamismo del montaje y los movimientos de cámara.
Robbie, también productora, de ascensión meteórica en su trayectoria tras interpretar a la esposa de Leonardo DiCaprio en 'El lobo de Wall Street', se desenvuelve como quiere en la pista gracias al trabajo del departamento de efectos visuales y al esfuerzo de las dobles deportistas. Tonya, incapaz de salir airosa en su lucha contra las circunstancias, perseguida por la mala suerte, es la encarnación de esa clase trabajadora que suspira por cumplir el sueño americano pero no termina de coger aire. Tonya cae hacia abajo cuando parece despegar, en la línea de los protagonistas de 'Dolor y dinero', la mejor película de Michael Bay. Y cuando peor van las cosas, aparece el crimen. Las compañías pueden arruinarte la vida. Y una educación represiva y agresiva en el hogar conduce a la frustración y el trauma. Inevitable no acordarse también de 'Amy', el dramático documental sobre Amy Winehouse, otro ejemplo de la carrera de una artista destruida por su pareja y progenitor, esta vez con final tremendo.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Carnero a Puente: «Antes atascaba Valladolid y ahora retrasa trenes y pierde vuelos»
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.