'Masters del Universo: Revelación': Kevin Smith asesina infancias
Primera temporada ·
El realizador de 'Clerks' ha renovado una serie de los años 80 hiriendo el orgullo de los defensores acérrimos de la cultura de la nostalgia, convertida en negocio. El resultado respeta el espíritu original, adaptándose a los nuevos tiempos
Si existe un cineasta por antonomasia que haya volcado sus filias en su obra, revelándose como un friki orgulloso de serlo, ese es Kevin Smith -con permiso de Álex de la Iglesia-. Sus películas están trufadas de referencias a su pasión por los cómics y ... la cultura popular, como bien demostró en los diálogos y la ambientación de la estupenda 'Mallrats'. A pesar de dejar claro que ama aquello que le marcó en su infancia en todo lo que hace, no se ha librado de las quejas de los internautas cuyo orgullo generacional ha herido al firmar la nueva entrega de la serie de dibujos animados 'Masters del Universo'. La serie original, vista en las televisiones en los años 80, era un catálogo de juguetes, no estaba a la altura de otras propuestas contemporáneas como 'Dragones y Mazmorras', pero el paso del tiempo la ha convertido en objeto de culto, aparentemente intocable. A pesar de que el bueno de Kevin se ha volcado en el sentido de la maravilla y la aventura para crear un reboot que respeta el sobrevalorado espíritu del material de partida, las críticas le han llovido en las redes sociales, ese lugar donde el anonimato permite a personas supuestamente maduras, generalmente hombres, comportarse como niños en el mal sentido. Protestar es tendencia, a ser posible de la manera más hiriente posible.
Al igual que ocurriera con la imaginativa revisión de 'Thundercats', 'Masters del Universo: Revelación' no ha gustado a los defensores de la pureza nostálgica, cuyo sentido de la creatividad consiste en que nadie toque aquello que vieron en su infancia y les dejó huella, no necesariamente por su calidad artística. No hay que tocar aquello que recuerdan, que no tiene porqué ser la realidad. La mayoría de los referentes de nuestra niñez no se sostienen con el paso del tiempo y es mejor no repasarlos. El mundo evoluciona y lo interesante es que las viejas ideas se adapten a la actualidad manteniendo su esencia. Así lo ha visto Kevin Smith, empecinando en ofrecer a la audiencia aquellas sensaciones que tuvo de crío con los cambios oportunos para que también las compartan los nuevos espectadores. Todo adquiere sentido para un Peter Pan confeso con los pies en la tierra, pero su osadía de perpetrar algo más que un viaje melancólico ha recibido puntuaciones nefastas en la red, a diferencia de las excelentes críticas en los medios especializados. A pesar de honrar como se debe a una serie de dibujos animados que, vista hoy, pierde toda la gracia, algunos usuarios de Internet han volcado su ira, una vez más, con la excusa de que un desalmado ha torpedeado su memoria emocional.
'Masters del Universo: Revelación' comete el atrevimiento de no cargar la acción sobre el mítico He-Man e insuflar energía a la franquicia dándole protagonismo a una mujer, la guerrera Teela, un cambio radical a los ojos de mentes con prejuicios. Esta decisión ha herido el orgullo masculino de un sector de haters compungidos, que ya esperaban ansiosos expulsar su rabia incontenible con el hacha afilada en Twitter antes del estreno, como el ejército de trolls en 'En Señor de los Anillos'. A pesar el ruido inevitable -el resultado es lo de menos, protestar es el objetivo pase lo que pase-, los gruñidos no han podido ensombrecer un trabajo digno. La continuación de las tribulaciones de los muñecos de Mattel puede no convencer, pero los argumentos en contra son poco consistentes y se basan principalmente en una idea preestablecida de lo que debería ser el resultado en base a un único criterio personal. El gusto de cada cual no puede convertirse en un dogma de fe (¿alguien recuerda como una pieza magna la versión en imagen real con Dolph Lundgren?). Smith respeta espiritualmente la materia prima y se marca como showrunner un pintón divertimento. La serie renovada es más sombría y coral, lo que es de agradecer. Los personajes toman consistencia y da la sensación de que se ha querido 'marvelizar' el concepto, probablemente con olfato comercial.
Eternia y el castillo de Grayskull no son intangibles. Nada lo es en la era digital, donde el espectador multipantalla puede participar en la creación de múltiples maneras, no todas generosas. Kevin Smith, el niño que no quiere crecer, ha hecho algo parecido a lo planteado en 'The Mandalorian', a propósito de 'Star Wars', pero no ha caído de pie, tras la voltereta, según el mismo fandom que venera un canto a la nostalgia y pisotea otro. Quizás en la siguiente entrega de la serie He-Man vuelva a ser el rey de la función, lo que es probable siendo fruto del márketing. Y todos contentos, sobre todo Netflix. Los jerifaltes de la plataforma en streaming se frotan las manos cada vez que hay una polémica de esta intensidad, publicidad a la postre.
El osado Smith
Con 'Clerks´, Kevin Smith dio el campanazo y se convirtió en el rey de la comedia independiente americana, además de ser idolatrado por miles de fans, entusiasmados con la idea de que por fin un freak amante de 'Star Wars'y los tebeos de superhéroes era capaz de arrasar en taquilla expulsando sus filias y fobias sobre celuloide de saldo. Cineasta de culto precoz, cayó en las fauces de Hollywood y se edulcoró. Suavizó sus chistes políticamente incorrectos y abrazó el mainstream de mala manera, perdiendo la gracia y el favor de su público. Probablemente consciente de la situación, con la reivindicable 'Red State' decidió volver a sus orígenes y esgrimir buenos diálogos, marca de la casa, giros inesperados y un ritmo endiablado al servicio de una propuesta que basculaba entre el thriller de acción y el cine de horror. Por algo se llevó el Premio a la Mejor Película en el festival de Sitges, donde muchos de sus antiguos seguidores respiraron tranquilos, encontrándose de nuevo con su héroe de antaño. Con la bizarra 'Tusk' renovó el carnet de director molón, uno de los nuestros, certificado cool que había perdido definitivamente con la horripilante 'Cop out (vaya par de polis)'. Posteriormente, la delirante 'Yoga Hosers' y el reboot innecesario de 'Jay y Bob el silencioso' de nuevo le restaron puntos. El lanzamiento de 'Masters del Universo: Revelación' le ha vuelto a situar en el ojo del huracán, mientras prepara el rodaje de la tercera entrega de su añorada ópera prima: 'Clerks 3'.
Límite de sesiones alcanzadas
El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a las vez.
Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Sesión cerrada
Al iniciar sesión desde un dispositivo distinto, por seguridad, se cerró la última sesión en este.
Para continuar disfrutando de su suscripción digital, inicie sesión en este dispositivo.
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.