Jack

La primera temporada se estrenó hace cuatro años; la segunda, un año después; y la tercera, con la odiada pandemia de por medio, ha tardado más de tres años en emitirse. La serie ha tirado de los clásicos enemigos estadounidenses para enfrentarse a nuestro héroe. Hemos visto a terroristas árabes, a dictadores latinoamericanos y ahora a unos nostálgicos soviéticos que intentan recuperar el imperio de la hoz y el martillo con un plan maquiavélico. Pero no solo de enemigos externos se tiene que ocupar Ryan, sino también de los internos. Convertido en un prófugo, intenta salvar al mundo de la enésima hecatombe mientras se escabulle de los que eran sus compañeros y teje alianzas con personas de dudosa moralidad.

Todo un ejercicio geopolítico, que ya hemos visto en numerosas ocasiones y que viene acompañado por un viaje por media Europa mostrando lugares con encanto. Una forma de recorrer el Viejo Continente que ya realizó hace años Jason Bourne y que 'Jack Ryan' intenta emular sin demasiado éxito. La serie se ha desinflado con el paso de los años y ni siquiera las escenas de acción son como las de antes.