El elefantito de 'Star Wars'

Este mote cariñoso corresponde a uno de los personajes, Neel, que pertenece a una raza sin especificar. Según el 'showrunner' de la serie, John Watts, no es un ortolano como Max Rebo, uno de los músicos del palacio de Jabba en 'El retorno del Jedi', a pesar de las notables semejanzas. Realmente, no importa. El descubrimiento de su origen no altera el disfrute de 'La tripulación perdida', sobre todo si se ve acompañado de niños. A ellos les da igual que haya un paquidermo niño, un droide conduciendo el autobús o un lobo como capitán pirata. Todo les cuadra y sumergirse con ellos en esta aventura es una gozada.

Porque la última arista de 'Star Wars' es solo eso, una aventura espacial en la que cuatro niños la lían en su planeta al encontrar una nave enterrada y acaban en el otro extremo de la galaxia. Cómo volverán a su escondido planeta es el eje de esta serie que recoge las esencias de las clásicas películas de aventuras. Sin más pretensiones.