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«Hace sesenta años era una leyenda. Hasta que desapareció sin dejar rastro. Fue olvidado por todos. Ahora ha vuelto, en el momento más difícil. Porque el pasado nunca muere. En España, el pasado siempre vuelve. Con rencor». Con estas contundentes palabras en su contraportada, ... negro sobre rojo, se presentaba en septiembre de 2015 el primer volumen de '¡García!', un cómic publicado por la editorial bilbaína Astiberri que tardó en ver la luz más de lo esperado, tras conocerse la noticia de su posible materialización según una idea largamente acariciada por Santiago García, guionista galardonado con el Premio Nacional por 'Las meninas'. El proyecto mutó en su concepción para adaptarse a los tiempos, al estirarse su nacimiento. El panorama político, con indudables paralelismos con el pasado, es vital en la trama. Además, el dibujante inicial, Manel Fontdevila, tuvo que bajarse del carro por cuestiones de agenda, tomando las riendas del apartado gráfico un titánico Luis Bustos, responsable de la novela gráfica basada en 'Fariña', que lo dio todo para que la propuesta tomase forma. Tres volúmenes están editados hasta la fecha, con dos libros más por venir, ya en el horno en paralelo. La adaptación audiovisual de este título esencial de nuestra historieta reciente está siendo la comidilla en el medio: por fin una versión de un tebeo autóctono en imagen real con fundamento. La serie también ha tardado más de lo deseado en convertirse en una realidad. Se presentó un avance en 2021 en el Festival de San Sebastián, tras muchos meses de desarrollo, preparación y rodaje. Se estrena en la plataforma HBO Max tras cosechar excelentes comentarios de crítica y público en Sitges, marco ideal para su lanzamiento promocional.
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Durante la primera y más dura etapa del confinamiento, Bustos estuvo trabajando en el tercer libro de '¡García!', lo que le ayudó a «tirar adelante mientras en todo el mundo pesaba la incertidumbre». A la vuelta de la pandemia la tercera entrega del cómic invadió las librerías y la noticia de su conversión en imagen en movimiento agitó el sector de la historieta nacional. «'¡García!' se va a convertir en una serie de una plataforma en streaming muy conocida», se comentaba en internet. ¿Ayudará al cómic este boom? «De momento, gracias a la producción de la serie, como tebeo ha sido amortizado con creces y nos ha dado la oportunidad de continuar trabajando en futuros libros», recalcaba en su día el dibujante. «Espero que una vez se estrene, ayude a la venta de los cómics». Responsable también de las viñetas de 'Endurance', 'Versus' o 'POP. ¡No me quito esa canción de la cabeza!', una enciclopedia musical y emocional que emula el tamaño de un vinilo, es una de las voces que ha alabado el resultado final del salto de su obra del papel a la pantalla, algo poco habitual en el bando de los creadores originales, que suelen ver cómo compran los derechos de su trabajo para inventarse otra cosa completamente diferente (ahí está 'El vecino', cuyo resultado se alejaba de su orígen, el sugestivo tebeo de Pepo Pérez y el propio Santiago García).
El 17 de octubre fue el preestreno de la serie en un cine el centro de Madrid, donde ha levantado ampollas una publicidad que cubre la fachada de un edificio alto de la ciudad, con una imagen de la Cruz del Valle de los Caídos y la leyenda: «En el Valle descansaba un superhombre». Cada cual que haga sus interpretaciones, pero está claro que la temática de la serie, una suerte de capitán América cañí que regresa del pasado, tal y como anuncian las primeras líneas del presente texto, puede causar controversia. Santiago García, único guionista español que ya cuenta con dos adaptaciones de su obra en dos plataformas en el candelero, Netflix y HBO, califica la adaptación como «sensacional». «Me siento muy afortunado de que se haya invertido tanto talento y recursos en hacer un proyecto como este», comentaba con orgullo y entusiasmo el día de la premiere madrileña en sus redes sociales. «Se nota el amor y la ilusión invertidos en cada plano. Se nota el compromiso de un director de talento enorme como Eugenio Mira, y el inmenso puesto por los guionistas, Sara Antuña y Carlos de Pando. Han trabajado muchísimo durante mucho tiempo para hacer suya la serie sin que dejara de ser nuestra. A los lectores de '¡García!' les puedo asegurar que lo que van a ver en pantalla es completamente reconocible. Todo lo que hay en esta serie es 100% ¡García! Pura raza ibérica». «No era fácil adaptar un cómic así», señalaba el cineasta y guionista Manuel Bartual en Twitter la misma noche del estreno. «No solo es buena, sino que además es una de las mejores y más ambiciosas adaptaciones que he visto nunca de un tebeo».
El primer episodio de '¡García!' se emite en abierto el viernes a las 22:00 h. en DMax y continúa en exclusiva en HBO Max. Detrás de las cámaras de la adaptación cabe recordar el talento visual de Eugenio Mira, cuyo debut como director, 'The Birthday', protagonizado por Corey Feldman ('Los Goonies'), cuenta con una incontable legión de fans. En su trayectoria figuran títulos que no dejan indiferente, como 'Agnosia' o 'Grand Piano', además de encargarse de la segunda unidad en 'Jurassic World: El reino caído', de J. A. Bayona, y 'Gernika', de Koldo Serra. La serie es un punto y aparte en muchos aspectos en el audiovisual nacional, desde su concepción hasta su resolución. Unax Mendía firma una fotografía exquisita a las órdenes de Mira, cuidadoso con cada encuadre y movimiento de cámara. '¡García!', con Veki Velilla ('El club de los lectores criminales') y Francisco Ortiz ('El Cid') a la cabeza del nutrido reparto, puede definirse como un cruce audaz entre el Capitán América y Roberto Alcázar y Pedrín, la excusa perfecta para diseccionar el estado de las cosas en la España actual, polarizada ideológicamente. Hay acción y aventura, pero la aguda mirada al país está ahí, como ya lo estaba en las fantásticas viñetas.
La sátira y el thriller, con una clara conexión con nuestra realidad, corre por las venas de '¡García!'. El cómic, poderosas viñetas de trazo expresivo en blanco y negro, ha iluminado el camino, presentando a un entrañable superagente especial, congelado en el tiempo durante medio siglo, que escapa de la cámara de criogenización para encontrarse con un mundo completamente diferente en algunos aspectos, pero desastrosamente igual en otros. La corrupción campa a sus anchas y alguien tiene que realizar el trabajo sucio. El destino de un país está en manos de un hombre de ayer que debe enfrentarse hoy a sus propios miedos. «Santiago García y Luis Bustos han construido un relato de aventuras de rotunda eficacia y de lectura ágil, al que la realidad española pasada y presente añade sombras que fuerzan al reconocimiento e inducen a la reflexión, más allá del entretenimiento bien aderezado», reseñaba el experto Juan Manuel Díaz de Guereñu en las páginas de 'El Correo' sobre la novela gráfica. «Certera sátira política que se beneficia del dinámico estilo que le aporta Bustos, que trae lo mejor del manga y del cómic americano», destacaba sobre el tercer tomo, centrado en Catalunya, el divulgador Diego García Rouco en el site especializado 'Zona Negativa'. «Y la parte más crítica resulta una perfecta radiografía de las muchas miserias de la clase política española. Pero lejos de ser sectaria tiene su ración para todos, sean del signo que sean». Quizás corran ríos de tinta, o exabruptos en Twitter, tras el estreno de una serie que subraya las posibilidades del cruce de medios en nuestra industria cultural y abre una interesante vía de fertilización transversal. Crucemos los dedos.
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