Tiktokterapia
CRÍTICA DE TELEVISIÓN ·
La serie documental 'Adictos a la pantalla', de reciente estreno, se preocupa por la sobredosis de las redes sociales, el porno virtual o el juego 'online'Secciones
Servicios
Destacamos
CRÍTICA DE TELEVISIÓN ·
La serie documental 'Adictos a la pantalla', de reciente estreno, se preocupa por la sobredosis de las redes sociales, el porno virtual o el juego 'online'El maestro del dibujo y genio del humor gráfico, Quino, orgulloso argentino, referente en el arte y en la vida, describe, en una de sus cientos de brillantes páginas, cómo una suerte de flautista de Hamelín atrae con su instrumento musical a un grupo de ... ovejas en el campo. Los borregos van haciendo cola atraídos por el sonido, como el popular cuento, pero esta vez entra en juego un nuevo elemento. Un diablillo acerca un televisor a la masa congregada. El aparato electrónico hechiza igualmente a los corderos y al solista, que acaba convirtiéndose en otro carnero embobado ante el poder de la pequeña pantalla. Una genialidad visionaria, como tantas otras viñetas inmortales del perspicaz artista, de ojo crítico imperecedero, trazo fino, elegante y personal. Su 'Quinoterapia' es de obligada lectura. Si hoy tuviera que rehacer este lúcido chiste, tendría que añadir más información a la ecuación: un teléfono móvil con TikTok echando humo.
Para las nuevas generaciones el móvil no es un teléfono, ojo con llamarles sin avisar, es de mala educación. Quizás interrumpas el visionado del fascinante testimonio de un 'influencer' comedor de hamburguesas o el enésimo baile de un grupo de gente descoordinada. Los progenitores preocupados instalan aplicaciones para controlar las horas que gastan sus vástagos pasando videos fugaces con el dedo, pero la medida no basta para suavizar el enganche a un invento cuyas consecuencias nos inquietan sobremanera. La serie documental 'Adictos a la pantalla', de reciente estreno, se preocupa por la sobredosis de las redes sociales, el porno virtual o el juego 'online'. Los testimonios van hacia el mismo lugar: el horror existencial. Si miras fijamente el celular, el abismo te devuelve la mirada. Quino se quedó corto.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.