Todas las caras de Tom Hanks

Fue el rey de la comedia durante la década de los 80 gracias a títulos como 'Despedida de soltero', '1, 2, 3, splash', 'Esta casa es una ruina' o 'Big', por la que llegó a ser nominado al Oscar. Nadie hacía reír como él ni conseguía arrasar en taquilla con casi todos los filmes que protagonizaba.

Su elección para este filme de Jonathan Demme fue un golpe de efecto. El director escogía al rey de la comedia para ponerse en la piel de un abogado homosexual que contrae el VIH y es despedido de la empresa para la que trabaja. Salió bien. Hanks demostró que su carrera podía dar mucho más de sí y que era capaz de enfrentarse a retos mayores que los que le habían ofrecido hasta entonces. Ganó un Oscar. El mismo año protagonizaba, además, 'Algo para recordar', de Nora Ephron, junto a Meg Ryan. Los dos son éxito en taquilla que catapultan a este actor.

Su segundo Oscar llegó con una comedia dramática en la que encarnaba a un discapacitado mental que es testigo de algunos de los acontecimientos más trascendentales de la historia de Estados Unidos. La imagen del protagonista sentado en un banco mientras espera al autobús forma parte de la memoria colectiva de los cinéfilos.

La Tierra se le quedaba pequeña a Hanks y decidió viajar a la luna como tripulante del Apolo 13, el vehículo espacial más famoso de la Historia. El actor encarnaba en esta película de Ron Howard a uno de los astronautas seleccionado por la NASA para realizar la misión y que se perdió en el espacio, James Lovell. De hecho el personaje real participó en el filme realizando un pequeño cameo.

Spielberg y Hanks son una de las parejas mejor avenidas del Hollywood de los últimos años. Juntos trabajaron por primera vez en 'Salvar al soldado Ryan', pero después repitieron en 'Atrápame si puedes', 'La terminal', 'El puente de los espías' o 'Los archivos del Pentágono'. En la primera, ambientada en la Segunda Guerra Mundial, encarna a un capitán en busca de un paracaidista que ha perdido a todos sus hermanos en combate.

A Hanks le cambió la cara completamente para ser el protagonista de 'Náufrago', puesto que tuvo que dejarse barba y perder kilos. Es uno de esos papeles que llevan implícito un sacrificio físico. Se lo exigía el personaje, un superviviente de un accidente aéreo. La película, sobre cómo se defiende este hombre en una isla desierta, resultó ser un trabajo bien hecho y entretenido, que después se ha imitado o ha servido de inspiración de series y otras películas.

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Ahora reniega de ella. Dice que era una tontería. Eso ya lo sabíamos muchos, incluso antes de ver la película, sobre todo si habías leído el 'best-seller' de Dan Brown. Tanto esta como su continuación, 'Ángeles y demonios', están basadas en dos libros que acumulaban legión de seguidores. Hanks prestó su cara al protagonista de la trama que giraba en torno a una teoría de la conspiración sobre el Santo Grial.

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Hanks se puso tras las cámaras en este filme (ya había debutado como director en 'The Wonders') que él mismo protagonizó sobre un hombre que debe dar un giro radical a su vida y que toma la decisión de volver a la Universidad. El actor se reinventa en una historia que habla precisamente de esa necesidad de cambio que algunas personas experimentan.

Clint Eastwood tampoco tenía dudas de que Hanks podía convertirse en el capitán Sully. Un héroe por accidente que no tiene más remedio que aterrizar sobre el agua después de que el avión sufra un incidente. El Hanks más maduro tiene una sensibilidad extrema y una capacidad para el trabajo sorprendente.

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'Elvis' es una de las películas de la temporada y en ella Hanks interpreta a un manager del cantante. Una oportunidad única para conocer al artista y a todos los que le rodearon. Ha sido recompensado por la Academia y tiene posibilidades de ganar su tercer Oscar.