La trilogía de Boris Karloff como el monstruo de Frakenstein

Como se sabe, la historia original fue creada por Mary Shelley una noche de noviembre de 1816 durante la cual, un grupo de amigos contaban buenas historias fantástica de terror en una mansión junto a un lago suizo, y ella daba a luz al legendario monstruo en una novela titulada 'Frankenstein o o el moderno Prometeo'. En esta trilogía, sólo la primera se basa en el relato de Shelley, las otras dos, al igual que las múltiples versiones del Monstruo son simple elucubraciones de los guionistas, a partir del personaje, que pronto sería llamado popularmente como Frankenstein, como se llamaba su creador. La trilogía se encuentra disponible en Movistar Plus+. Además la primera se encuentra también en Filmin y en alquiler en Apple TV.

Protagonizada por Colin Clive, Mae Clarke, John Boles, Boris Karloff, Edward Van Sloan, Frederick Kerr, Dwight Frye y Lionel Belmore. Una obra maestra del cine de terror que se aproximó por primera vez a un personaje, el monstruo de Frankenstein, nacido de la pluma de Mary Shelley, que ha aparecido en infinidad de películas de todo género y condición. Además de la típica dicotomía del bien frente al mal que domina la película, ésta debe entenderse también como la historia paralela de una doble búsqueda, la de un científico que quiere crear la vida y la del monstruo que busca en los demás la belleza y la inocencia que no encuentra en sí mismo. La película consagró a Boris Karloff encasillándole en el personaje del monstruo, que tuvo que soportar toda su vida, después de que Bela Lugosi se negase a interpretarlo.

El doctor Herbert von Frankenstein (Colin Clive), prometedor médico, se embarca en un experimento tenebroso: construir, a partir de trozos de cadáveres, un nuevo ser humano. Ayudado por su criado Fritz (Dwight Frye), se adentra en los cementerios de la localidad, muy entrada la noche, para robar cadáveres, materia prima necesaria para lograr su experimento. Construido a base de trozos de cadáveres, al ser monstruoso creado sólo le falta un cerebro pero, por un error imperdonable, el doctor Frankenstein le coloca el de un asesino recientemente ejecutado. A continuación activa unos generadores eléctricos y, mediante la descarga de un rayo en un día de tormenta, hace revivir el cadáver. Pero el monstruo así creado (Boris Karloff), sometido a los malos tratos del jorobado Fritz, escapa y siembra el pánico allá donde va. Aturdido, llega a la orilla de un río donde se encuentra con el único ser que no siente miedo de él, una niña, la pequeña María (Marilyn Harris). Juegan a tirar flores a la corriente, pero el monstruo se entusiasma demasiado y, creyendo que la niña flota como las flores, la arroja al río. Esta muerte es el detonante de la ira del pueblo, que sale a la busca y captura del temible ser. Arrinconado en un viejo molino, los aldeanos prenden fuego a la edificación y el monstruo arde y muere entre las llamas.

La película también consagró a James Whale como un excelente director creador de inquietantes atmósferas (heredero directo del expresionismo alemán) y a la Universal como el estudio especializado en cine de terror, que durante toda la década de los 30 haría un buen número de excelentes películas de este género, rescatando de la literatura a personajes terroríficos, como 'Drácula', 'El hombre-lobo', «El hombre invisible» o 'La momia'. Tras el enorme éxito del filme, Whale haría poco después una secuela, «La novia de Frankenstein», de la que siempre estuvo mucho más satisfecho que la primera. La película se estrenó en España el 6 de marzo de 1932.

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Protagonizada por Boris Karloff, Colin Clive, Valerie Hobson, Ernest Thesiger, Elsa Lanchester, Gavin Gordon y Douglas Walton. De nuevo James Whale al frente de esta primera secuela que, durante toda su vida reivindicó como muy superior a la precedente. Whale (1889-1957) comenzó su carrera cosechando grandes éxitos en el teatro londinense, para posteriormente dar el salto a la dirección cinematográfica en Hollywood. Si bien su obra no se circunscribió exclusivamente al cine de terror (sólo se enmarcan en este género cuatro de sus más de veinte películas), sí es por su aportación al mismo por lo que es y será siempre recordado. 'El doctor Frankenstein' (1931), 'El caserón de las sombras' (1932), 'El hombre invisible' (1933) y 'La novia de Frankenstein' (1935). Whale es recordado, junto a Boris Karloff, como el padre de Frankenstein.

El monstruo (Boris Karloff) creado por el doctor Herbert Von Frankenstein (Colin Clive) ha fallecido al arder el viejo molino. Pero ¿esto es realmente cierto? Esto mismo se pregunta Lord Byron (Gavin Gordon) en aquella lejana noche de 1816 en una lujosa mansión acompañado por Percy Shelley (Douglas Walton) y su joven compañera Mary Godwin (Elsa Lanchester). «No es ese el final, ni mucho menos, -bromea Mary-. ¿Os gustaría oir lo que sucedió después? Me apetece contarlo. Es una noche perfecta para el misterio y el horror, el aire mismo está lleno de monstruos». Así Mary Selley lleva la narración en el punto en que nos dejó la primera parte de la saga, el viejo molino ardiendo... y el monstruo escapando y huyendo de él, chamuscado pero vivo, y con pánico al fuego. El siniestro doctor Pretorius (Ernest Thesiger) enterado de la creación del monstruo de su colega von Frankenstein, le chantajea obligándole a crear, con los mismos métodos, una compañera para criatura. El experimento es un éxito y la nueva criatura (Elsa Lanchester) retorna a la vida. El monstruo se enamora de ella, pero es rechazado. El dolor y el odio hacia todo ser vivo le lleva en un ataque de rabia, a volar por los aires el laboratorio en que fueron creados ambos.

En esta película Whale incluye a Mary Shelley como la narradora de la historia. Está interpretada por Elsa Lanchester, que tiene un doble personaje, pues también es la novia del monstruo. Es una película que, junto al fantaterror, también posee mucho sentido del humor. Con esta película se consiguió superar en muchos aspectos a la anterior: Ternura, horror y humor se unen mágicamente conformando una de las obras maestras del cine: El personaje de Mary Shelley revela que los protagonistas de su novela sobrevivieron con el Dr. Frankenstein, incitado por un científico incluso más loco, crea una compañera para su monstruo. El guion lo firman John L. Balderston y William Hurlbut, a partir de los personajes creados por Mary Shelley en 'El doctor Frankenstein o el moderno Prometeo'. La película, galardonada con el Oscar al mejor sonido, se estrenó en España el 7 de octubre de 1935.

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Protagonizada por Basil Rathbone, Boris Karloff, Bela Lugosi, Lionel Atwill, Josephine Hutchinson, Donnie Dunagan, Emma Dunn y Edgar Norton. Tercera y última entrega del Frankestein' original de Boris Karloff: Propiciada por el enorme éxito de las dos precedentes, la Universal hizo esta tercera entrega titulada 'La sombra de Frankenstein', también conocida como 'El hijo de Frankenstein' (la traducción de su título original), que utilizaba un recurso habitual de la época en las secuelas: Desaparecido el personaje original, siempre aparecía un hijo. Ya alejada del relato de Mary Selley, pero utilizando de nuevo al monstruo, su inmortal personaje, con un guion firmado por Wyllis Cooper, cuya dirección pasó ahora a las manos de Rowland V. Lee, otro director bajo contrato en la Universal.

25 años después de la muerte del monstruo (Boris Karloff), el barón Wolf von Frankenstein (Basil Rathbone), hijo del doctor Frankenstein, su esposa y su hijo, llegan al pueblo de sus ancestros para hacerse cargo del viejo castillo familiar. Sin embargo, su presencia no es bien vista por las autoridades y vecinos del lugar, que no olvidan al terrorífico monstruo creado por el padre de Wolf. Allí, el recién llegado conoce a Ygor (Bela Lugosi), un pastor loco que esconde a la terrible criatura. Buscando limpiar el nombre de la familia, revive al monstruo y lo intenta rehabilitar.

El encargado de dar vida al barón Wolf von Frankenstein iba a ser otro clásico del cine de terror, Peter Lorre, pero la Universal no pudo convencer a la 20th Century Fox (que tenía a Lorre bajo contrato), para que pudiera aparecer en la película, y fue sustituido finalmente por Basil Rathbone, muy popular por entonces como Sherlock Holmes en una saga de películas sobre el popular detective. Además aparece en un personaje menor a un irreconocible Bela Lugosi, que se había consagrado como otro mito del terror, el conde Drácula, en 1931 y que entonces se había negado a interpretar al Monstruo. La película, ya con mucho menos éxito que las dos anteriores, se estreno en España el 9 de noviembre de 1942.