'Sonic, la película': cine familiar de la consola a la pantalla

Aún suena en algunas cabezas el fracaso estrepitoso, creativamente hablando, del salto de las consolas a la gran pantalla de hits del campo de los juegos electrónicos como 'Street Fighter' o 'Super Mario Bros', propuestas que, vistas con el paso del tiempo, se pueden degustar como delirantes rarezas de serie B, etiqueta que no le corresponde a 'Sonic, la película', que, por contenerse para no mosquear a los fundamentalistas de la cultura popular, se queda en una muestra más de cine familiar, tan simple como el mecanismo interno del material de partida, luego eficaz de cara a su público potencial. A los mandos, el debutante Jeff Fowler, realizador de cortometrajes de animación que se ha visto al frente de un producto para las masas donde, probablemente, poco ha podido hacer salvo cumplir con el expediente y aceptar que había que trabajarse más los efectos visuales tras el cachondeo extendido en las redes el día que se estrenó el primer trailer. El filme cuenta con musicón de Junkie XL, siempre dando en el clavo, con James Marsden y Jim Carrey en el reparto en carne y hueso.

'Sonic, la película' presenta al popular puercoespín azulado, astro de una de las franquicias de videojuegos más rentables de la historia, sumergido en una peripecia donde se junta con un policía interpretado por Marsden, el Cíclope de X-Men. A lo buddy-movie, película de colegas, pretenden detener los planes de dominación mundial del malvado y excéntrico Dr. Robotnik, encarnado por el histriónico Carrey, encantado de conocerse, con un bigote king size. Acción y humor inofensivo es lo que propone el estreno familiar del fin de semana. Así hay que tomárselo, como una fuente de entretenimiento sin dobleces.