'Secretos de un escándalo': La historia de amor que escandalizó al mundo

LeTourneau murió de cáncer a los 58 años en 2020. Su exalumno y exmarido cuidó de ella en los últimos momentos. Aquella historia de amor prohibida dio la vuelta al mundo en la era preinternet. La profesora estaba casada y tenía cuatro hijos cuando conoció al chaval. El marido pidió el divorcio y se fue a vivir a Alaska con los niños. Los padres de Fualaau la denunciaron, pero, como afirman en un documental de 2018, siempre pensaron que era «una buena persona que había cometido un gran error».

El célebre idilio del colegio Shorewood de Seattle está en el germen del guion que Natalie Portman entregó a Todd Haynes en plena pandemia. 'Secretos de un escándalo', en cines desde el 23 de febrero, es la traducción entre nosotros del original 'May December', una expresión que alude a la relación entre dos personas con gran diferencia de edad. Julianne Moore encarna a Gracie Atherton-Yu, una mujer de Savannah (Georgia) que estuvo en el ojo del huracán hace veinte años cuando inició un romance con su actual marido Joe (Charles Menton), un coreano-americano que por entonces apenas tenía 13 años, 23 menos que ella. Ahora forman una –en apariencia– idílica familia, que pasará una dura prueba cuando aparezca una actriz que quiere interpretar a Gracie en una película. Elizabeth Berry (Natalie Portman) actuará como detective y psicóloga para tratar de entender a esa mujer que se acostó con un niño.

«'Secretos de un escándalo' explora uno de los grandes misterios de la especie humana: nuestro rechazo a mirarnos a nosotros mismos», establece Todd Haynes. «Lo hace con una película sobre una familia estadounidense nacida de un escándalo, que se convirtió en un acontecimiento mediático nacional». Al director de 'Lejos del cielo' y 'Carol' le fascinó el guion de Samy Burch, nominada este año al Oscar al mejor guion adaptado. «Aborda temas potencialmente escandalosos con tanta meticulosidad que consigue explorar la psique de los personajes de la historia con una sutileza poco común».

La cuarta película de Todd Haynes que compitió por la Palma de Oro conecta con sus obras anteriores. Como en 'Carol', existe un romance condenado a ojos de la sociedad de su tiempo; al igual que en 'Velvet Goldmine' y 'I'm not There' –particular biopic de Bob Dylan–, se explora el universo del show business, en este caso el cine; como en 'Lejos del cielo', Julianne Moore borda a una mujer traumatizada.

El trío protagonista de 'Secretos de un escándalo' lleva tanto tiempo intentando fingir quienes son que se ha quedado atrapados en el personaje. En el fondo, Haynes construye una película que habla de la imposibilidad de la ficción para atrapar la realidad. Por mucho que el personaje de Natalie Portman quiera capturar la personalidad de esa madre de familia no puede hacerlo. Quizá porque todo lo que se desarrolla ante sus ojos no deja de ser más que un simulacro. 'May December' habla de las máscaras que nos colocamos en la vida y establece un sofisticadísimo juego de espejos e identidades que va mucho más allá de su morboso punto de partida inicial.

«La primera vez que leí el guion me resultó difícil no pensar en 'Persona' de Bergman por dos motivos», recuerda el director, que homenajea el clásico en una escena. «Primero, por la interacción entre los dos personajes femeninos, uno de los cuales también es actriz, como ocurría en 'Persona'. Después por la fusión entre varios temas de mujeres».

Haynes también repasó películas protagonizadas por mujeres mayores que entablan relaciones con hombre jóvenes, como 'El graduado', 'El crepúsculo de los dioses' y 'Domingo, maldito domingo'. Su última obra a ratos divierte y en otros momentos desasosiega hasta lo indecible. A esto último contribuye sin duda la banda sonora de Marcelo Zarvos, que calca la música de Michel Legrand para 'El mensajero' con amenazantes notas de piano percutantes.

'Secretos de un escándalo' no es una película cómoda de ver. Resulta complicado identificarse con alguna de sus dos protagonistas, una tratando de rastrear la verdad y la otra viviendo una realidad sostenida en la negación. Lo resume Todd Haynes: «Yo me siento atraído y sorprendido a la vez por una historia y unos personajes con lo que nunca estoy del todo, ni a favor ni en contra».