Borrar
Monica Belucci, en un fotograma.

'Nekrotronic', horror e internet de serie B

En cartelera ·

Dirigida por Kiah Roache-Turner, este relato que reúne demonios e internet se pierde en su desacomplejado discurso y cansa al ofrecer al espectador una retahíla de efectos visuales desiguales que afectan al ritmo de la pieza

Jueves, 13 de agosto 2020

Se presentó hace dos años en el festival de Sitges, en la Sección Oficial fuera de concurso, esta producción australiana con espíritu de serie B que mezcla ciencia-ficción, terror y comedia sin encontrar el tono adecuado. Eran altas las expectativas en el conocido certamen ... catalán, pero el pase del filme se fue desinflando. Tras un divertido y despendolado inicio, 'Nekrotronic' se pierde en su desacomplejado discurso y cansa al ofrecer al espectador una retahíla de efectos visuales desiguales que afectan al ritmo de la pieza. La narración que plantea se desdibuja por culpa de una realización dispersa. No obstante, brotan algunas ideas interesantes cuando el público menos se lo espera, una pena que queden desperdigadas, y puede ser un buen producto de entretenimiento al gusto del consumidor cinéfago si se emplea el chip mental adecuado durante el visionado. Todo comienza cuando un simple trabajador del servicio de alcantarillado descubre que es el único ser humano sobre la Tierra capaz de detener el plan maléfico de una demoníaca corporación que depende devorar las millones de almas que vagan por todo el planeta. El individuo en cuestión, cedido en adopción cuando era un bebé, va haciéndose con sus poderes sobrenaturales a medida que se van desvelando los secretos ocultos de sus existencia. Espectros y seres del averno atacan sin piedad al protagonista, complicando su gesta. Como novedad, las criaturas diabólicas se extienden gracias a internet. La lucha entre el bien y el mal tiene lugar el la red oscura.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

larioja 'Nekrotronic', horror e internet de serie B