Maria Schneider por partida doble

Protagonizada por Maria Schneider, Marlon Brando y Jean-Pierre Léaud. Una de las películas claves del cine moderno. Bertolucci retrata toda la desesperación de un hombre, ya de vuelta de todo, con un pasado muy amargo, y la aventura de una jovencita con ganas de descubrir cosas. La película habla del sexo, pero también del desarraigo, de la soledad y de la desesperación. Marlon Brando interpreta de forma magistral a un expatriado, confuso y torturado, cuya esposa acaba de suicidarse. Ansioso por abandonar el sombrío hotel donde vive, decide alquilar un apartamento, coincidiendo en el mismo con una caprichosa joven con la que mantendrá periódicos encuentros sexuales. Al lado de Brando que se crece en cada escena (él mismo colaboró con Bertolucci en desarrollar su propio personaje), está una Maria Schneider casi debutante y un Jean Pierre Leaud que vuelve a hacer su mismo personaje de siempre. Fue la película más sincera de Bertolucci, muy contestada en su momento, y símbolo de la ansiada libertad para muchos españoles que, estando terminantemente prohibida aquí, acudían a verla a los cines de los pueblos franceses fronterizos, que por entonces conocieron riadas de españoles en busca de un cine imposible de encontrar en su país. El paso del tiempo se ha encargado de poner a la película en el gran lugar que le corresponde y que las escenas eróticas se hayan diluido frente a otras películas mucho más osadas, ganando ese aspecto desolador de dificultad de comunicación entre los seres humanos que es el núcleo de 'El último tango en París'.

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Protagonizada por Maria Schneider, Jack Nicholson y Ian Hendry. Coproducción entre Italia, Francia y España, donde se rueda gran parte de la película. Es un filme en el que Antonioni eludía constantemente lo ya visto y lo ya hecho. Su voluntad de innovar dio una gran originalidad al filme, presente en unas excelentes interpretaciones y en una perfección técnica y artística que redondea una obra maestra. Un célebre periodista inglés decide una investigación profunda de los manejos e intrigas para los golpes de estado en una República Centroafricana. Su celo profesional le lleva a meterse en una aventura de la que no podrá salir fácilmente, dado que sus objetivos están más metidos de lo que él pueda pensar en el asunto. Su enlace muere misteriosamente y decide suplantarle, dado su enorme parecido físico. Sus investigaciones le llevan a meterse prácticamente dentro del centro de la organización, recibiendo incluso cantidades por los trabajos realizados, que él no realiza. En Barcelona conoce a una jovencita (Maria Schneider) que logra sacarle de más de un aprieto en su largo peregrinaje, y llega a un pequeño hotel en un pueblecito de Almería.