Adiós a Lucía Bosé, la bella que vino de Italia
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Musa del neorrealismo, ha fallecido a causa de una neumonía provocada por el coronavirusLucía Bosé, la bella que vino de Italia, musa de directores neorrealistas como Michalangelo Antonioni, que la consagró a nivel mundial, ha fallecido en su casa de Brieva (Segovia) a los 89 años a consecuencia de una neumonía provocada por el coronavirus.
Lucia Borloni nació ... en Milán, el 28 de enero de 1931. Comenzó a trabajar a los 14 años como dependienta de una pastelería. En 1947 fue proclamada Miss Italia y tres años después debutaba en el cine, en un cortometraje de Dino Risi sobre las 'Cinco jornadas de Milán', para convertirse en 1950 en la gran protagonista de 'Non c'è pace tra gli ulivi' (1950) de Giuseppe de Santis, largometraje que forma el último capítulo de la trilogía campesina del maestro neorrealista en el cual tiene el papel de una pastora de la Ciociaría, al lado de actores tan prestigiosos como Raf Vallone y Folco Lulli. En el mismo año, la actriz ofrece una significativa muestra de su talento en 'Crónica de un amor', espléndida opera prima de Michelangelo Antonioni, en la cual interpreta con convicción a la protagonista en una historia en la que se analizan con minuciosidad los sentimientos de la alta burguesía milanesa en un trasfondo policial. Antonioni se convierte en su verdadero padrino, que la lanza definitivamente.
En 1951 Lucía Bosé regresa de nuevo junto a de Santis: interpreta el papel de Simona en 'Roma hora 11', película que trata el tema del desempleo femenino y que ofrece una característica galería de retratos de mujeres. En el año 1953, Antonioni le ofrece el papel de Clara Manni, en 'La signora senza camelie', una película que narra la historia de una empleada que se convierte en actriz y que narra lo artificial del mundo cinematográfico, fiel espejo de la aridez que caracteriza las relaciones entre los seres humanos.
En el mismo periodo, Lucía Bosé también es la protagonista de numerosas películas que confirman su facilidad de adaptarse con excelentes resultados a cualquier exigencia expresiva. La actriz se dedica a la comedia rosa tardo-neorrealista interpretando dos de los títulos más famosos de la filmografía de Luciano Emmer: el divertido 'París, siempre París' (1951), con Aldo Fabrizi y, sobre todo, 'Tres enamoradas' (1952), en la cual personifica a una modista que, tras convertirse en maniquí, no olvida sus orígenes modestos ni el amor por su novio, simple pero simpático. En aquellos años está ya considerada como la actriz más sensible del cine italiano. Junto a Walter Chiari, Bosé también participa en numerosas películas de carácter cómico y burlesco entre las cuales cabe señalar 'E l'amor che mi rovina…' (1951) en la cual interpreta a una joven profesora de esquí bajo la dirección de Mario Soldati.
El año 1955 es fundamental para la actriz. Se convierte en la protagonista de un importante título que representan todo un éxito profesional para una carrera que todavía está a los inicios. 'Muerte de un ciclista', su primer encuentro con España, que rueda con dirección de Juan Antonio Bardem, donde ofrece una brillante interpretación en una de las obras más interesantes realizadas bajo la dictadura franquista. Luis Buñuel la llama para 'Así es la aurora', que rueda en Francia donde interpreta a Clara, una joven viuda italiana que reside en Córcega y vive una purísima historia de amor con el medico Valerio (Georges Marchal).
El 1 de marzo de 1955, Lucía Bosé se casa por lo civil con el célebre torero español Luis Miguel Dominguín en Las Vegas, y el 16 de octubre, lo hace de nuevo con el diestro en una falsa ceremonia religiosa en Madrid, impuesta por el régimen. El torero y la actriz tuvieron 3 hijos: Miguel (3 de abril de 1956), Lucía (19 de agosto de 1957) y Paola (5 de noviembre de 1960). También fue la abuela de Bimba Bosé, también fallecida, que siguió los pasos artísticos de la familia. Por un tiempo, se retira de la carrera cinematográfica, que solo reemprenderá tras separarse del marido en 1967.
Entre 1968 y 1976, Lucía Bosé vuelve a trabajar, solicitada en Italia y en el extranjero, tanto por cineastas brillantes y populares como Federico Fellini ('El Satiricón'), los hermanos Taviani o Mauro Bolognini. Sin embargo, el retorno al cine lo hace bajo la dirección de Pere Portabella, exponente destacado de la escuela de Barcelona, con 'Nocturno 29' (1968). En España, Bosé también participa en otras películas entre las cuales cabe señalar 'Del amor y otras soledades', de Basilio Martín Patino y 'Un invierno en Mallorca', (1970) de Jaime Camino en la que daba vida a Georges Sand, la esposa de Chopin, 'Ceremonia sangrienta' (1972), una película de terror dirigida por Jorge Grau, 'Vera, un cuento cruel' o 'Los viajes escolares' (1973), de Jaime Chávarri.
En 1976 participa en la serie de televisión de Adolfo Marsillach 'La señora García se confiesa'. Tras esta, la carrera de Lucía Bosé sufre una segunda interrupción, pero tras una breve aparición en 'Entre tinieblas', de Pedro Almodóvar, en 1984, volverá al cine solo a finales de los años ochenta interpretando a dos figuras maternas en 'Crónica de una muerte anunciada' (1987) de Francesco Rosi (basada en la famosa novela de Gabriel García Márquez), en 'Volevo i pantaloni' (1990) de Maurizio Ponzi, y en 'El avaro', versión cinematográfica de la obra de Molière. A partir de los años 90, Lucía Bosé va espaciando cada vez más sus participaciones en el cine, sin dejar del todo de lado su profesión, como su trabajo en 'El niño de la luna', de Agustí Villaronga.
La actriz vivía en Brieva, España, país al que se ligó sentimentalmente desde hace muchos años. En el año 2000 decidió hacer realidad un sueño de su juventud: abrir el primer Museo de Ángeles del mundo. Creó en el pueblo segoviano de Turégano un museo dedicado a las representaciones de los ángeles, con más de ochenta obras de artistas contemporáneos procedentes de diversos países, así como diversas esculturas de lo más angelicales. sin embargo, la falta de apoyos tanto estatales como del propio municipio de Turégano le obligó a cerrarlo. En el año 2003, publicó su autobiografía titulada 'Lucía Bosé. Diva divina', escrita por la periodista española Begoña Aranguren.
«Lo que más me molesta es que me convertí en la mamá de Miguel Bosé. El otro día me enfadé en la calle con una mujer y le dije: 'Señora, Miguel Bosé no tiene madre'. Se quedó muerta. Antes era la mujer del torero, ahora soy la mamá de Miguel Bosé. Nunca me llaman por mi nombre. Qué le vamos a hacer. Han sido famosos y maravillosos los dos», dijo la actriz en 2011.
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