Halloween: las máscaras del terror

De ahí hemos pasado a que El Corte Inglés cuente con su propia sección de disfraces y maquillaje terrorífico, a que los colegios conviertan a sus alumnos en zombis y a que esta noche de miércoles salga de marcha tanta gente como en las fiestas patronales. Estrenada el pasado viernes, 'La noche de Halloween' se ha aupado a lo más alto de la taquilla española con una recaudación de más de un millón de euros en apenas tres días y más de 180.000 espectadores. Jamie Lee Curtis vuelve a sus 59 años a encarnar a Laurie Strode, la víctima de Michael Myers, que en estas cuatro décadas entre rejas no ha aplacado su furor asesino.

Cuatro años antes de que John Carpenter cimentara las bases del género 'slasher' (de 'slash', cuchillada) con un psicópata indestructible, Tobe Hooper se inspiró en Ed Gein, el Carnicero de Plainfield, para inaugurar el cine de horror moderno con 'La matanza de Texas'. Leatherface y su sierra eléctrica bebían así del asesino en serie que también alimentó los personajes de Norman Bates en 'Psicosis' y de Hannibal Lecter en 'El silencio de los corderos'.

Muchos de estos iconos del terror comparten un elemento común: el uso de una máscara que les confiere el anonimato. En un género proclive a las secuelas para seguir exprimiendo el filón, los villanos enmascarados también han servido para que no fuera demasiado importante el actor que encarnaba al personaje.

«Michael Myers, con su máscara y su uniforme de empleado de gasolinera, es un personaje medio humano, medio sobrenatural», define John Carpenter. «Es la personificación definitiva del mal. Es despiadado; con él no sirve de nada razonar ni rezar para salvarte».

El actor y especialista James Jude Courtney ha contado en esta última entrega con la ayuda de Nick Castle, que dio vida a Michael Myers en la cinta de 1978, para meterse en la piel del psicópata. Curiosamente, la icónica máscara era en realidad una prótesis facial confeccionada para el actor William Shatner en su papel de Capitán Kirk de 'Star Trek'. Varias copias que se comercializaban en tiendas fueron adquiridas por el equipo de 'La noche de Halloween', que la utilizaron como base de la máscara de Michael Myers. Por algo un psiquiatra le define en la película como un niño absorto, inexpresivo y con la mirada en negro.

El actor islandés Gunnar Hansen acababa de terminar en la Universidad de Austin sus estudios de inglés y matemáticas cuando se enteró de que en Austin rodaban una película titulada 'La matanza de Texas'. A Tobe Hooper le encantó el tamaño gigante de Hansen –1,93m–, cuya presencia amenazadora reforzó con una motosierra real que manejaba a duras penas tras la máscara. Cobró dos euros la hora en una película que costó 130.000 euros y solo en EE UU recaudó 28 millones. Hansen, que escribió un libro con un sinfín de anécdotas sobre el rodaje, 'Chain Saw Confidential', participó en algunas otras películas de terror, incluida la secuela de 'La matanza de Texas' en 2013, aunque en realidad se consideraba escritor y periodista. Su mayor orgullo era un tratado de historia y naturaleza sobre varias islas de EE UU.

La máscara de hockey por la que reconocemos al tarado de la sangrienta saga no apareció hasta la tercera entrega de una franquicia que ha superado la docena de filmes. Aquel niño hidrocéfalo del que se burlaban sus compañeros en el campamento Crystal Lake y que resurgía del lago para vengarse de sus abusodores ha sido encarnado por diferentes actores a lo largo de su historia. Con cuatro episodios, Kane Hodder es el actor que más provecho lo ha sacado, hasta el punto de que en la vida real tiene tatuada la palabra 'kill' (matar) en la parte interna de su labio inferior. Cuando no firma autógrafos en convenciones de cine de terror, Hodder juega en campeonatos profesionales de póquer.

El productor Bob Weinstein, hermano de Harvey, no estaba muy convencido de que la máscara que Wes Craven había encontrado en una de las localizaciones de 'Scream' resultara terrorífica. Claro que lo más importante no era el aspecto del asesino que acechaba a Drew Barrymore en la escena inicial, sino su voz amenazante por teléfono. El propio Craven se calzó la capa negra y se puso la máscara que remite a 'El grito' de Edvard Munch en la célebre escena de la cocina, mientras el actorRoger Jackson puso la voz al otro lado del teléfono.

Jigsaw (Puzle) es el nombre con el que se conoce a un asesino en serie que planifica sus crímenes de manera teatral. El dilema moral de las víctimas les obliga a sacrificarse para que otro sobreviva en trampas cada vez más sofisticadas y crueles. El actor Tobin Bell ha sido el encargado de dar vida a Jigsaw en las ocho películas de la saga, estrenadas siempre en vísperas de Halloween. Formado en el Actor's Studio junto a Lee Strasberg, Bell, de 76 años, ha aparecido en papeles mínimos en películas como 'Tootsie', 'Veredicto final' y 'Uno de los nuestros'. El mayor sádico del cine de terror es en la vida real un amante del montañismo y toca la guitarra.