'El cuervo', la película que iba a lanzar al estrellato a Brandon Lee

Iba a ser la cinta que lanzara al estrellato a Brandon Lee, hijo del actor Bruce Lee, pero acabó convirtiéndose en una pesadilla. 'El cuervo' surgió como una adaptación del cómic homónimo, creado por James O'Barr, una historia gótica fantástica que dirigiría Alex Proyas.

La película se rodaría en localizaciones de Los Ángeles con un presupuesto de 23 millones de dólares. Junto a Brandon Lee, completaban el reparto Rochelle Davis y Ernie Hudson. Con un presupuesto relativamente ajustado, iba a ser un rodaje medio en 1993, de los habituales de Hollywood para una cinta de corte fantástico-terrorífico destinada mayoritariamente a un público juvenil. Pero todo acabó en tragedia.

Contaba cómo Eric Draven, una estrella del rock, y Shelly Webster están a punto de casarse, pero la noche antes del enlace son asesinados brutalmente. Un año después, el alma de Eric vuelve a la Tierra en forma de cuervo para vengarse. La trama se inspiraba en eventos trágicos de la vida real ya que la prometida del creador del cómic James O'Barr fue asesinada por un conductor ebrio. El autor además se inspiró en una historia que leyó sobre una pareja asesinada por un anillo de compromiso de 20 dólares.

En los primeros días del rodaje, el carpintero Jim Martishius de 27 años sufrió graves quemaduras en su cuerpo cuando toco líneas eléctricas con su grúa, poco después un publicista tuvo un accidente de automóvil, y un camión del equipo se incendió de forma misteriosa. Además, un miembro del personal se cayó por un techo y se rompió varias costillas y un camión atravesó el set. Finalmente, una tormenta destruyó equipo y dejó varios miles de dólares en daños.

Pero lo peor sucedería a diez días de finalizar el rodaje: en uno de los accidentes más improbables y desafortunados de Hollywood, el 31 de marzo de 1993, a la edad de 28 años, Brandon Lee murió a causa de de un disparo en una escena en la que se recuerda cómo el personaje de Funboy, interpretado por Michael Massee, le dispara. La pistola debía estar cargada con balas de fogueo, pero inexplicablemente estaba cargada con munición real. Anteriormente a la toma fatídica, se había rodado un primer plano del revólver Magnum que usaba ese personaje, que lo mostraba cargado. Normalmente para dichos primeros planos se usan cartuchos falsos, sin pólvora ni fulminante. Pero, por falta de presupuesto, se adquirieron balas reales a las que se quitó la pólvora, pero no el fulminante. En algún momento alguien apretó el gatillo, el percutor disparó el fulminante y la bala se quedó encajada dentro del cañón. A causa de la falta de tiempo, no se inspeccionó adecuadamente el arma, sino que se quitaron las balas y se colocaron balas de fogueo. Cuando Michael Massee apretó el gatillo, la pólvora de la bala de fogueo detonó con la fuerza suficiente para empujar la bala que había quedado atascada en el cañón hacia afuera, directamente hacia el abdomen de Brandon Lee. Éste cayó al suelo, herido mortalmente. Cuando los productores vieron que no se levantaba, lo trasladaron rápidamente al hospital New Hanover Regional Medical Center, en Wilmington, Carolina del Norte. Allí los médicos intentaron salvarle, sin éxito: falleció a la 1:03 de la tarde del 31 de marzo de 1993, a 17 días de su boda y a 8 días de terminar el rodaje. La investigación posterior concluyó que tantas personas habían cometido una negligencia en ese rodaje que resultaba imposible señalar un culpable. La productora fue multada con 700.000 euros.

Y si la muerte de Bruce Lee estuvo rodeada de un halo de misterio, incluyendo una teoría que sostenía que el actor fue asesinado por un maestro de kung fu mediante la técnica de 'dim mak' o 'toque de la muerte', la de su hijo Brandon no se quedó atrás. Bruce Lee predijo la muerte de su hijo cuando despertó de un coma, muchos años antes de que Brandon ni siquiera hubiese tomado la decisión de convertirse en actor. Según testimonios de amigos cercanos al actor, antes de comenzar a rodar 'El cuervo', Brandon habló sobre su muerte y de la posibilidad de morir tal como lo había hecho su padre, antes de finalizar el rodaje de la película. Michael Massee, que fue el encargado de realizar por error el mortal disparo, nunca se ha atrevido a ver la película completa. Tras terminar el rodaje se instaló Nueva York y dejó la interpretación por un año. La película se finalizó con ayuda de dobles de cuerpo, y se superpuso la cara de Lee para los 52 planos que faltaban por rodar. Se ha dicho que la grabación real de la muerte de Lee se incluyó la película. Sin embargo, esa grabación estuvo retenida por un juez y cuando la productora la recuperó, la cinta fue quemada para que nadie pudiese alentar el morbo.