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El cine diseñado para el gran público merece mayor respeto cuando no engaña a nadie. Aunque el póster o las imágenes del tráiler puedan llevar a engaño -hay maniobras de marketing que ensalzan aspectos que luego apenas están presentes en el filme-, rara vez una ... comedia americana protagonizada por rostros hollywoodenses da gato por liebre al espectador entregado. 'La ciudad perdida' se mueve en estos términos, parodiando el género de aventuras sin perder sus intenciones comerciales al servicio de tres presencias rentables en los créditos: Sandra Bullock, Channing Tatum y un cameo espectacular de Brad Pitt.
La presencia de este último ya no es una sorpresa, se pierde tan graciosa baza debido al peso publicitario de los avances promocionales, pero también luce en escena con brío Daniel Radcliffe, interpretando a un inesperado villano en las antípodas de Harry Potter. Dirigen el tema los casi debutantes hermanos Adam Nee y Aaron Nee ('Band of Robbers'), cuyo oficio se intuye, sin complicarse la existencia. La historia comienza presentando a una escritora de novelas románticas de éxito, cuya boyante carrera literaria se ha sustentado en inventar relatos de amor en lugares exóticos, siempre protagonizados por un galán que, curiosamente, tiene su correspondencia en la vida real.
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Bullock encarna a la literata superventas, en su línea habitual, mientras Tatum -¿reflejo de las nuevas masculinidades?- interpreta al modelo que personifica a su creación, tan audaz como atolondrado. En un giro inesperado la protagonista, sumida en el tedio, es raptada por un sujeto obsesionado con encontrar un tesoro antiguo que aparentemente figura en la rentable prosa de la escritora -chispeante Radcliffe-. Comienza así una aventura que traspasa el papel de los libros descritos en la propia ficción, dando pie a una comedia con escenas de acción que se disfruta con el chip mental adecuado en la piel de voyeur cinematográfico desprejuiciado.
'La ciudad perdida' se aplica el esquema de cine de género millonario que funcionó antaño para revisarlo con humor. Si la fórmula tiene cabida o no, a día de hoy, es decisión de la taquilla, pero la sensación es que estamos ante una sana maniobra de recuperación del cine de evasión con colorantes y aditivos, consciente del concepto, que maneja los tópicos con algarabía en su beneficio sin quebraderos de cabeza. Más cerca de 'Tras el corazón verde' que de 'En busca del arca perdida', con 'Jungle Cruise' cercana en el tiempo, vuelve a contar, con especial gracejo, la historia de dos personas, un hombre y una mujer -la extraña pareja-, que se pierden en la jungla y tienen que entenderse y resolver sus diferencias para lograr sobrevivir. En el fondo, un clásico.
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