El voluntario, agente del cambio social

Creo sinceramente que los medios de comunicación tenemos sensibilidad tanto con los colectivos desfavorecidos como con quienes les ayudan. Personas mayores, en exclusión social, menores, mujeres, minorías étnicas, inmigrantes y un largo etcétera de personas que son objeto de acciones de voluntariado. No cabe duda, se podría hacer más.

La ayuda económica, pública y privada, a estas entidades es imprescindible. También las empresas, desde su Responsabilidad Social Corporativa, tienen a su alcance adoptar medidas que supongan un mayor compromiso en la mejora de la vida de la comunidad con patrocinios, apadrinamiento de proyectos, creación de eventos solidarios...

«La Ley 6/1996 de enero, del Voluntariado y las diferentes normas de las comunidades autónomas coinciden en gran medida en las notas configuradoras y en los principios que inspiran la acción voluntaria: solidaridad, voluntariedad y libertad, gratuidad y vinculación a la entidad de voluntariado y a un programa de voluntariado», recoge el BOE. La Ley 45/2015, de 14 de octubre, de Voluntariado «no solo no se aparta de ese núcleo esencial del actuar voluntario, sino que lo refuerza y lo adapta a las necesidades de un voluntariado del siglo XXI».

Ser voluntario no es una pose. Ser voluntario es ser agente del cambio social.

El Día Internacional del Voluntariado se celebra cada 5 de diciembre. Ojalá cada jornada fuera el día del voluntario.