Viva la peña

L as peñas no saldrán a la calle en San Mateo. No protagonizarán ni una actividad ni media. Otro año con los chamizos cerrados, el 'Espacio Peñas' mudo, las degustaciones en conserva. Así lo ha acordado por mayoría la federación que agrupa al colectivo, anteponiendo ... las ganas contenidas de celebración a la responsabilidad para evitar cualquier situación de riesgo en un contexto de pandemia aún latente. «No tiene sentido ni ponerse la blusa», ha sentenciado su presidente. La frase condensa la contundencia de la decisión, pero sobre todo despeja dudas sobre cuál será la postura de uno de los actores medulares para que sean fiestas o dejen de serlo. Sin medianías. Se trata, según sus propias palabras, de poner un granito de arena para que la semana otros años más esperada y ahora más incierta no aliente los contagios ante virtuales aglomeraciones. Los peñistas han asumido que cualquier otra actitud no solo hubiera sido un agravio para quienes más han sufrido (y siguen sufriendo) la enfermedad, desde el personal sanitario hasta quienes han visto el coronavirus de frente, sino que habría lanzado un falso mensaje de que aquí no pasa nada. Una sensatez, por cierto, pareja a la que ha cundido en otras ciudades que han vuelto a poner sus fiestas patronales en cuarentena mientras el Ayuntamiento de Logroño se aferra a unos sanmateos light. Las peñas han entendido que las masas que tanto temen los epidemiólogos y agradece el virus no se atajan limitando los eventos más multitudinarios, sino dejando de abonar la sensación de fiesta que saca a la gente a la calle aunque no haya fuegos, carrozas o lanzamiento de cohete.